Luego del ingreso de nuevos proyectos a la Legislatura sobre el congelamiento de las tarifas de luz y agua, el gobernador Miguel Lifschitz afirmó que "no es viable" postergar el ajuste en la facturación de las empresas vinculadas al Estado provincial.
"Los legisladores tienen libertad para opinar, pero nosotros tenemos la obligación de gobernar y garantizar el servicio", argumentó el titular de la Casa Gris respecto de las propuestas que llegaron tanto desde sectores opositores como desde la Defensoría del Pueblo.
En relación a la situación de la EPE (Empresa Provincial de la Energía) y Aguas Santafesinas (Assa), el mandatario aseguró: "Necesitamos los recursos que vienen de las tarifas".
El dirigente socialista respaldó el esquema de funcionamiento actual de Assa tras el rotundo rechazo que generó la última audiencia sobre el aumento en los valores del servicio. En este sentido, indicó que la firma "es una empresa en la que el Estado aporta para cubrir el déficit operativo y para hacer inversiones que de otra manera no se podrían hacer".
