Colonias de verano: cuáles son las afecciones más comunes y consejos para prevenirlas

Durante la época estival aparecen patologías vinculadas a la piel, los oídos e incluso pediculosis. Recomendaciones y cuidados.

Colonias de verano: cuáles son las afecciones más comunes y consejos para prevenirlas
Recomendaciones para evitar enfermedades durante las Colonias de Vacaciones

Llegan las vacaciones, los chicos comienzan a asistir a las colonias de verano y aparecen afecciones como otitis, hongos y pediculosis. Si bien ninguna es grave, pueden dejarlos afuera de la diversión, por lo que especialistas dieron sus recomendaciones de prevención y tratamiento.

La otitis es la inflamación del oído. Existe diferentes tipos, pero la más común se denomina otitis media y se produce por la presencia de líquido. Puede ocasionarse por el frecuente contacto con el agua y porque los productos que se usan para el mantenimiento de las piletas son irritantes para la piel.

Como medida de prevención, se recomienda preparar en un gotero alcohol y vinagre de alcohol en partes iguales y aplicar dos gotas en cada oído al finalizar el día de natación.

Además, los especialistas insisten en que no es conveniente la autohigiene del oído, ya que el cerumen contiene ácidos grasos que protegen naturalmente la piel de la infección bacteriana. Cuando el exceso produce disminución de la audición o prurito es recomendable visitar al médico que puede retirarlo sin lastimar el oído.

Los hongos en la piel, son otra de las afecciones comunes, relacionadas al calor y la humedad. Los tratamientos pueden ser locales, por ejemplo el uso de cremas, o por vía oral, pero resulta importante mantener la zona bien seca.

Otra preocupación para los adultos que llevan a los chicos a las colonias de vacaciones son los piojos, cuya forma de contagio más frecuente es la directa, de cabeza a cabeza, pero existe también el contagio indirecto, a través del intercambio de objetos personales.

Tal como hacían las abuelas, para prevenirlos, se recomienda que los chicos mantengan el cabello firmemente recogido. También es conveniente revisar a todos los miembros de la familia y, si hace falta, tratar a aquellos que tengan liendres o piojos.

Es importante destacar que los pediculicidas no tienen poder residual, por lo que no ofrecen protección contra la reinfección. Los piojos tardan siete días en desarrollarse desde que son depositados los huevos, por lo cual debe repetirse el ciclo de tratamiento cada semana.

En cuanto a los peines, cepillos, vinchas, hebillas y otros accesorios para el cabello, se debe tener como hábito su uso individual. Además, hay que desinfectarlos sumergiéndolos en agua a más de 50 grados, mientras que las prendas de vestir, sombreros, toallas, almohadas y juguetes de peluche deben lavarse separadamente y exponerse al calor del secado por al menos 20 minutos.

También se les puede colocar previamente spray de permetrina, una sustancia que se utiliza como insecticida, acaricida y como repelente de insectos y piojos, completaron.