No solo el calor afecta el humor de más de un rosarino, los proeblemas de tránsito también temirnan con la paciencia de los vecinos que deben soportar desvíos en la circulación. Este domingo se hundió el pavimento en Laprida al 1000 y desde el Municipio determinaron el corte total en la zona. La decisión afecta a varias líneas del Transporte Urbano de Pasajeros.
El aviso a la Intendencia sobre las dificultades que se registraban en la cuadra, ubicada entre San Juan y San Luis, fue el que gravitó para que se decidiera el cierre de la arteria, mientras se iniciaban las tareas para subsanar el problema.
Este lunes, la empresa Aguas Santafesinas cercó el lugar y comenzó a intervenir en la calle para trabajar en el tendido de cloacas que sería el que desencadenó las dificultades.