La Red de Casas de Protección y Fortalecimiento de Mujeres en riesgo de vida informó que la provincia aloja a 80 mujeres y 153 niños en situación de vulnerabilidad que no pueden ser albergados en casa de sus familiares o conocidos.
En toda la provincia hay 190 plazas, las cuales están constituidas por convenios que establecen el gobierno provincial con municipios y comunas. Gabriela Sosa, subsecretaria de Políticas de Género, explicó a El Litoral que "estas casas son una última alternativa para cuando una víctima tiene en riesgo su vida y no tiene en su entorno familiar o afectivo alguien que pueda protegerla y contenerla en un momento de crisis".
Las personas en situación de vulnerabilidad cuentan con un plazo de hasta tres meses para quedarse en estos hogares en los que cuentan con equipos interdisciplinarios que "trabajan en el proceso de fortalecimiento para devolverla a la posibilidad de vivir sin violencia".
“Es fundamentale el trabajo que se hace en territorio con las situaciones de violencia, es decir, quien conoce el entorno, las instituciones y demás que la rodean es el equipo local que en general es quien solicita un lugar para estas mujeres porque no econtraron alguien del entorno que la pueda contener. Este equipo de referencia es el que luego acompaña el alojamiento, visita y tiene entrevistas, trabaja y prepara la denuncia, es decir, hacen el seguimiento para que la vuelta a su lugar pueda ser de la mejor manera”, concluyó Sosa.