En la recta final de un año con complicaciones extra para quienes no tienen techo propio en medio de la pandemia, en Rosario proponen aumentar impuestos a viviendas ociosas. El proyecto marca un nuevo intento en el Concejo Municipal para paliar la situación de unas 50 mil familias que actualmente alquilan en la ciudad.
Según informó el edil del Frente de Todos, Eduardo Toniolli, a nivel local hay alrededor de 80 mil propiedades desocupadas. La suba de 50% en la Tasa General de Inmuebles (TGI) aspira a desalentar la especulación inmobiliaria y es una medida que también se discutió en hace un par de años en Buenos Aires.
La normativa que pretende aplicar parte de la oposición apunta a crear un registro municipal de viviendas ociosas. A partir de esa información y del tributo extra, calculan que es posible recaudar 352 millones de pesos anuales. Finalmente, la idea es dirigir esos fondos a créditos del Banco Municipal para inquilinos.
Toniolli recordó que en Rosario ya rige una ordenanza similar que impone una sobretasa para lotes baldíos en terrenos para uso industrial. Ahora su objetivo es sumar una herramienta para contrarrestar un "proceso de décadas de financiarización de la vivienda" y el aumento sistemático de los alquileres.