Luego del tercer puesto de Argentina en la Copa América, Lionel Messi llegó a la ciudad de Rosario donde descansará junto a su familia antes de retornar a España para comenzar la pretemporada con el Barcelona.
El capitán de la Selección Argentina se fue con una amarga sensación de Brasil tras las duras declaraciones contra Conmebol por el arbitraje ante el conjunto local y la expulsión frente a Chile en el encuentro válido por el tercer puesto de dicha competencia.
Junto al mejor jugador del mundo llegaron a la ciudad los rosarinos Ángel Di María y Giovani Lo Celso y el casildense Franco Armani. Los cuatro futbolistas fueron los únicos que no retornaron con el presidente de la AFA, Chiqui Tapia, y el resto de la delegación en un chárter en Ezeiza.
Messi y el resto de los futbolistas que tienen familia en esta ciudad o en la región se subieron a un micro que los llevó directamente desde la pista a sus automóviles particulares sin pasar por migraciones. Luego se trasladaron en el avión privado del astro; un Gulftream V del año 2004; hacia Rosario.
