La inseguridad castiga a los indefensos cordobeses en cada rincón de la provincia y los ciclistas se han vuelto un blanco predilecto de los delincuentes, que incluso recurren a la violencia más salvaje como ocurre en Río Cuarto, donde advierten que los robos son cada vez más frecuentes y violentos.
Para exteriorizar esa cruda situación, cientos de ciclistas marcharon en la noche del jueves por las calles de Río Cuarto, para expresar sus reclamos a las autoridades policiales y municipales, en una caravana que partió desde la Costanera, a metros del Vacunatorio municipal, en dirección al Centro del Imperio.
“Nos movilizamos para pedir más seguridad. No solo para nosotros, los ciclistas, sino en general”, expresó Iván Pérez, parte del grupo de pedalistas que convocó a la bicicleteada.
Por su parte, Cecilia Cortés, del mismo colectivo opinó que “es muy peligroso poder salir a rodar de noche, cuando todos podemos hacerlo después de nuestras obligaciones diarias. Cada vez que volvíamos, nos enterábamos de un nuevo asalto violento. El mismo modus operandi: te golpean, te tiran al suelo, te patean y te sacan todo”, alertó en diálogo con Puntal.
Tras contar que la modalidad más común es la del robo “piraña” comentó con resignación que “esto es cosa de todos los días. Además del perjuicio económico, lo que nos preocupa es la violencia y el daño físico que producen. Unos meses atrás, en diciembre, a una chica le quebraron la clavícula y desde entonces decidimos llevar siempre encima gas pimienta”, finalizó.
