Desde la perspectiva del Secretario de Calidad en Salud del Ministerio de Salud de la Nación Arnaldo Medina, se generó un cambio en el comportamiento social.
"Destaco el trabajo integrado con el Ministerio de Salud de la Provincia aunque nos preocupa alguna descoordinación especialmente con el Ministerio de Seguridad de la Provincia. Esto hay que decirlo", reconoció en diálogo exclusivo con Cadena Tiempo. "Es fundamental que estemos juntos como lo hemos hecho con todas las jurisdicciones del país sin importar el signo político. No hay otra manera de superar ésta situación y es la línea que marcó Alberto Fernández desde un comienzo", reconoció.
En cuanto a los resultados preliminares del Plan Detectar, la estrategia que permite la detección de casos sintomáticos en territorio indicó que ésta metodología permitió detectar situaciones y establecer aislamientos rápidos que disminuyen la posibilidad de contagios. "Se adoptó la conducta de cuidarse ya no de manera individual, sino evitando contagiar a los demás", expresó.
"Tenemos la certeza de detectar casos que de otra manera no podríamos detectar. Aumentó un poco la cantidad pero es porque había muchos que pasaban desapercibidos. La gente se quedaba en su casa a veces con síntomas; circulando y generando contagios. Este trabajo permite cortar esa cadena y también, reafirma la conducta social".
"La información –explicó el funcionario nacional– que recibimos es que la gente lo está tomando bien; adoptó una conducta de cuidarse ya no de manera individual, sino evitando contagiar a los demás. Todo esto suma en algo que se está viendo que es el ordenamiento en el sistema de Salud, en los hospitales donde se descomprime la situación". En esa línea, Arnaldo Medina valoró el aporte del voluntariado que interviene en la toma de datos y relevamientos. "Es emocionante ver cómo responden porque sin ellos, sería imposible realizar ésta tarea". "Quizás se va postergando el trabajo de carga de datos y cuando se hacen los reportes, aparecen los positivos y no los negativos que son muchos.
Estamos preocupados en mostrar la realidad para que lo conozca la población y no dar una imagen falsa como si no se estuviera testeando”. “Es muy difícil explicar lo que podía suceder y no sucedió. Como ha sucedido en otros lugares, cuando hay descontrol se paga con vidas. Se llegó a una situación de riesgo importante; muy preocupante y la población lo percibió”. Y reconoció que éste desafío sanitario supera cualquier tipo de previsión.
"Todos estamos aprendiendo, es algo nuevo e inédito para lo cual nadie estaba preparado. Quién dice tener todo claro y cree tener la receta para hacer las cosas, no es así". Relacionó a los contagios con hábitos y costumbres no instalados en la población. "Hay muchos casos leves que cursan pocos síntomas, un dolor de garganta o una fiebre de horas o cefalea o pérdida del olfato. Normalmente cuando ocurre esto, uno está acostumbrado a quedarse en su casa e incluso seguir trabajando o haciendo vida normal. Esto todavía no lo tenemos incorporado".
El secretario de Calidad en Salud dijo seguir la evolución del COVID-19 sin que aún puede preverse un eventual rebrote. "Lo que viene es una etapa de convivencia con el virus, tenemos que bajarlo todo lo ue podamos y seguir aprendiendo, tomando las medidas que hagan falta apostando a la conducta social". "La vacuna –planteó Medina– es la esperanza, vamos a firmar algunos contratos con laboratorios mientras se trata en el Senado.
En el segundo trimestre del año próximo comenzaría una vacunación masiva que podría adelantarse para grupos de riesgo aunque también se avanza con ensayos en tratamientos nuevos". Y negó la posibilidad de cualquier retroceso de fase, desestimando el esquema de cuarentena. "No se puede tener una buena actividad económica y social con el nivel actual de contagios que hoy tenemos en muchos lugares del país. No vamos a eliminar el virus que seguirá circulando pero ya no podremos volver a la fase inicial".