Durante esta jornada el comisario Cristian Cayún, licenciado en criminalística y jefe de la unidad especial de policía científica, realizó una extensa deposición donde dio detalles sobre los relevamientos llevados adelante en el sitio de los hechos. Acompañándose de proyección de imágenes expuso a las partes y el tribunal acerca de los elementos colectados que sirven como pruebas para sostener la autoría del acusado.
Posteriormente, la mayoría de los testigos resultaron ser efectivos policiales actuantes en diversos procedimientos que permitieron reconstruir sobre las horas posteriores cuando Phillips llega a una estación de servicio que no está habilitada en la actualidad y donde se refugió en un viejo colectivo. Las inspecciones oculares permitieron observar manchas hemáticas y otros elementos, a la vez que también ratificaron las actuaciones efectuadas al momento de la detención, ocurrida al día siguiente del suceso en los baños de la estación.
El subcomisario Paulino Andrade de la unidad de investigaciones refirió no se lo veía muy bien fisícamente, con heridas visibles y debilitado y tan solo respondió cuando se le pidió que se identifique, llamándole la atención que no se quejaba por las lesiones que se observaban muy profundas.
El juicio oral y público continuará mañana a partir de las 9 con el tribunal integrado por los Jueces César Zaratiegui, Mirta Moreno y Sergio Piñeda. Por el Ministerio Público Fiscal se encuentra el fiscal general Arnaldo Maza acompañado por Guadalupe Serafini, en tanto que la defensa es ejercida por las doctoras María Laura Martensen y Romina Rowlands.