Una gran jugada de Romero cuando el partido iba camino al 0 a 0 terminó en un cabezazo goleador de Rubén Darío Gigena para, a los 39 minutos del segundo tiempo, poner el 1 a 0 para Sporting y llevar el delirio a las tribunas rojinegras.
Bastaron unos segundos para que el equipo de Fito Cuello acertara el golpe letal contra un rival que con un partido inteligente le estaba complicando la tarde.
Sporting no podía quebrar la resistencia de su adversario y debió recurrir a los relevos para cambiar la suerte, fueron justamente dos de los ingresados quienes elaboraron y ejecutaron la jugada del triunfo final.
En la previa Sporting era mucho más que su rival, por presente, por plantel, por jerarquía, el partido tenía un amplio favorito. Pero clásicos son clásicos y con un buen planteo táctico Rosario equilibró el mayor potencial el local.
Con un buen trabajo de presión para no dejar pensar y jugar a Sporting, el tricolor bloqueó los circuitos creativos rojinegros. Blanco y Ovando como primeros marcadores, buen trabajo en el medio de Dindart y Damián Fernández, y un acertado desempeño de la última línea hicieron que el primer tiempo fuera parejo, con escasas situaciones.
El plan que Rosario llevó dibujado en la pizarra de Mauricio Del Cero salió bien al cabo de los 45 iniciales, de hecho la más clara fue a favor, por un tiro libre de Trotta que pasó cerca del poste de Torres.
En el segundo tiempo la tendencia se mantuvo, intenciones por el lado de Sporting, tenacidad de Rosario para impedir que el rojinegro progrese y salir de contra.
Dos buenas intervenciones de Miranda ante remates de Sabatini y Otero, mantuvieron en cero el arco tricolor. Sporting se adelantó buscando el gol y dejó espacios.
Una corrida de Ovando por el centro del ataque con Trotta por la derecha y Medina por la izquierda fue la más clara para Rosario, 3 atacaban y solo defendían Fochesatto y el arquero Torres. Pero Ovando cometió un pecado capital: gula. Tenía dos pases claros para dejar a un compañero mano a mano con el arquero, pero como en el barrio "se la morfó" y terminó haciendo un tiro anunciado, débil y fácil para el arquero ante los insultos de sus compañeros.
Ese pecado capital mandó a Ovando al banco. Rosario dejó pasar la chance y pagaría con la derrota.
Un pase profundo de Castellano a Romero encontró a Gaby bien ubicado a espaldas de Rosales, doble enganche y cabeza levantada para hacer lo que no hizo Ovando. Habilitar a un compañero mejor ubicado, centro a la cabeza de Gigena y el cabezazo con todo el oportunismo de un "9" y la jerarquía de un gran goleador. La pelota al palo contrario del que viene el centro, bien colocado y lejos de Miranda. Golazo.
Los clásicos se gozan, pero se sufren. Carrizo en el tercer minuto de descuento tuvo el empate tras tomar un rebote, pero su remate se fue cerca, muy cerca del palo izquierdo de Torres.
No quedó tiempo para más y Sporting festejó por partida doble. Ganó el clásico y manda en Punta Alta, los resultados de la tarde le confirmaron al rojinegro que ya será el N° 1 para los playoff a falta de tres fechas para el final.