Diego Ortega, un joven de 33 años, fue dado de alta esta tarde, luego de estar internado e inconsciente tras recibir una brutal paliza de un grupo de delicuentes que tenían como objetivo robarle el celular. La víctima estaba volviendo a su casa luego de salir de un boliche, cuando fue atacado por la espalda por cuatro criminales y un niño de nueve años.
El hecho se dio este lunes, pasadas las 6.30 de la mañana, cuando Ortega regresaba caminando a su hogar con un café en la mano. Las cámaras lo registraron en la calle Murgiondo, entre Ascasubi y Ezeiza, a una cuadra de la estación de tren de Laferrere.
Las imágenes muestran cuando se le acercan tres jóvenes y un niño desde atrás. El más chico, según se conoció, era el hermano de uno de ellos. Los cuatro lo inmovilizaron y lo golpearon, logrando tumbarlo en medio de la calle donde continuaron pateándolo y dándole golpes de puños. Fue entonces cuando se acercó un cuarto hombre para seguir pegándole y, entre todos, sacarle sus pertenencias.
El video continúa cuando uno de los agresores, vestido de buzo blanco y con el rostro descubierto, le da una patada en la cara a Diego quien cae boca arriba, desmayado sobre el asfalto. Otra de las escenas indignantes la protagonizan tres autos que pasaron por al lado de la víctima sin ofrecerle ayuda.
Finalmente, aparecieron dos hombres que salieron a asistirlo desde una de las vivienda cercanas. Según los familiares del joven pasó una hora entre el ataque y su traslado, que debieron hacer ellos mismos hasta un hospital de González Catán.
Cómo sigue la investigación sobre el ataque
Si bien Diego fue dado de alta durante la tarde de este martes, sufrió varios cortes en la cabeza, un hematoma en el ojo izquierdo y perdió varias piezas dentales superiores. Asimismo, estuvo inconsciente durante todo un día.
“Queremos justicia y vamos a seguir esto hasta el final”, aseguró Daiana, una de las hermanas de la víctima. Además, denunció que reciben amenazas para que no difundan información por parte de los agresores desde el mismo celular que robaron.
En cuanto a los agresores, uno fue detenido “por robo agravado por haber sido cometido en poblado y en banda y lesiones”. No obstante, las autoridades dijeron que no podían retener mucho más al agresor ya que la víctima “no lo había denunciado”.
El sujeto, sin embargo, sigue en condición de aprehendido bajo una carátula por “robo agravado” en la que interviene la fiscal Belén Casal Gatto, titular de la UFI Descentralizada Nº 2 de Laferrere ya que cuando le allanaron el domicilio se encontró la billetera de Diego, que adentro tenía apenas 300 pesos.