Este miércoles 1º de agosto se celebra el Día de la Pachamama, tradición que en el litoral argentino es acompañada por la ingesta de tres tragos de caña con ruda.
La costumbre tiene arraigo en los pueblos originarios, más precisamente en los guaraníes. La creencia dice que, cada 1º de agosto del año, hay que beber tres tragos en ayunas para obtener sus beneficios. "Julio los prepara y agosto se los lleva", es un dicho de los aborígenes, que adoptaron la bebida como forma de alejar los males.
"Es una tradición que se emparenta con el agradecimiento a la Pachamama, la diosa tierra, pero que en esta región nos llega a través de los guaraníes y es ofrenda para que no falte el alimento y para que las pestes del frío no ingresen a las viviendas", explicó Carmen Gladys Bernatto, licenciada en Idioma y Cultura Guaraní, en diálogo con El Territorio.
La ruda es una hierba medicinal muy apreciada en la medicina natural de la región y macerada en la caña ofrece alivio a los dolores musculares, además de otros beneficios como prevención de gripes, resfríos y parásitos. Fue introducida primero por los indígenas, que le atribuían carácter medicinal, y luego adoptada por los criollos, que mantuvieron y difundieron la tradición de beberla cada 1º de agosto.
"Son tres tragos que se toman en ayunas y que combaten las enfermedades y la mala onda; para los que deben conducir temprano la recomendación es que pueden cumplir con el ritual lejos de las horas de manejo", indicó Julia Norma Catalano, especialista en gerontología y escritora. "El ritual se cumple en agosto porque coincide con el agradecimiento a la madre tierra, a la Pachamama, y porque en invierno era cuando los pobladores antiguos más sufrían las inclemencias del clima, el hambre, la mortandad de animale", añadió.
Los rituales de la Pachamama se inician el 31 de agosto en el norte argentino, e incluyen ceremonias con sahumerios en casas, comercios y hasta oficinas públicas.