Javier Milei exigió a sus ministros un recorte en la cantidad de empleados públicos que tiene hoy el Estado Nacional. Esta medida se encuadra dentro del “Plan Motosierra” y afectaría al personal cuyos contratos habían sido prorrogados por tres meses y vencen este 31 de marzo.
Es por esto que trabajadoras y trabajadores de la Administración de Parques Nacionales (APN) declararon el estado de alerta y movilización frente a la posibilidad de desvinculación de más de 1.200 personas.
“En Parques Nacionales trabajamos con la convicción de que nuestra función aporta al cumplimiento de los derechos constitucionales de la sociedad argentina. Realizamos tareas que son fundamentales para la protección del ambiente a través de la gestión y conservación de las áreas protegidas y la promoción del desarrollo local de las comunidades vecinas”, afirman desde ATE en un comunicado.
“Reducir el personal de la APN constituye un retroceso en la política ambiental nacional y se contrapone a la agenda internacional, que propone el aumento del territorio protegido y su gestión eficiente”, aseguran.
¿Qué tareas realizan los trabajadores de los Parques Nacionales?
La conservación del ambiente en Argentina es sostenida por trabajadores que se encuentra en cada rincón del país.
Virginia Gallardo es delegada de ATE y trabajadora del Parque Nacional Lanín, en la provincia de Neuquén. Allí se encargan de cuidar tres especies de árboles que no se conservan en ninguna otra área protegida del país: el Pehuén, el Raulí y el roble Pellín.
“También trabajamos en estrategias de conservación para mejorar el hábitat del huemul (considerado monumento natural nacional y especie en peligro de extinción). Damos asistencia a pobladores en producción sustentable. También activamos una primera respuesta ante eventos naturales como puede ser la erupción Volcán Puyehue, inundaciones, aludes y enfermedades zoonóticas como hanta virus o gripe aviar”, cuenta Virginia a Vía País.
Además, los trabajadores de Parques Nacionales son quienes gestionan un plan de manejo del fuego que implica la extinción de incendios forestales y se encargan de la gestión de sistemas de alerta temprana y la prevención de los mismos.
“Otra de nuestras tareas es la de conservar las cabeceras de cuencas hídricas de donde sale el agua que consumen gran parte de los neuquinos y rionegrinos”, explica Virginia.
Marcelo Rojas es geógrafo y trabajador de la Dirección Regional Patagonia Norte de Parques Nacionales. Allí se encargan de la protección de 717.261 hectáreas de Bosque Andino Patagónico y Estepa, de lagos, cursos de agua, flora y fauna que se encuentran en el Parque Nacional Nahuel Huapi.
“Somos responsables de la habilitación, control y fiscalización de los servicios turísticos que se brindan en este territorio. De cuidar a la gente que viene y de fomentar el turismo”, dice Marcelo a este medio.
Es que la promoción turística de Bariloche se basa, en gran parte, en los atractivos del Parque Nacional Nahuel Huapi. Se estima que el 90% de los visitantes que arriban, visitan el área protegida. Esto genera un impulso económico para ocho ciudades y parajes de la región cordillerana y costera de la provincia por la existencia de los Parques Nacionales.
Por último, consultamos a Paula Werber, quien es integrante del departamento de Conservación y Educación Ambiental del Parque Nacional Lago Puelo
“Nuestro aporte al país es la protección de 27.674 hectáreas de Bosque Andino Patagónico. Este parque cuenta con un microclima en el que habitan especies que no se encuentran en otras áreas protegidas”, nos cuenta.
Además de realizar las tareas que detallaron a este diario sus compañeros, Paula explica a Vía País que en Lago Puelo se encargan del mantenimiento de sendas, caminos e infraestructura como son los miradores y puentes. Y realizan la gestión ambiental de obras viales de la provincia, analizando sus impactos y las posibles emergencias ambientales que generan, como son los derrames.
Qué pasa si la motosierra pasa
“No sobra nadie”, es la consigna que adorna pancartas y banderas en las entradas de los Parques. Esta es la frase elegida por los trabajadores para visibilizar su conflicto. “Nosotros no somos la casta”, nos explican, sin poder creer que el ajuste caiga sobre ellos.
“Cada uno tiene una función que es irremplazable. Acá no soba nadie, al contrario, nos falta gente”, asegura Marcelo Rojas.
“Si no se renuevan los contratos en el Lanín, el parque se quedaría sin 123 agentes de conservación, todos profesionales, personal calificado y especializado con un promedio de contratos de más de 15 años”, cuenta preocupada Virginia Gallardo.
Paula Werber, por su parte, nos explica la situación en el Parque Nacional Lago Puelo: “Somos en total 47 trabajadores, de los cuales 16 son contratados. Si hay despidos, no podríamos realizar nuestros trabajos. Estamos muy lejos de la planta óptima de trabajadores, sería impensado reducirla aún más. Nos quedaríamos sin combatientes de incendios forestales, poniendo en riesgo a todas las áreas protegidas, a los visitantes, así como también a las localidades que nos rodean en caso de desatarse un incendio forestal, como ha ocurrido tantas veces ya”.
Esta misma situación se replica en los 55 Parques Nacionales de todo el país.
“Si hay despidos, se dejaría sin resguardo el patrimonio cultural y natural del país, como también la seguridad del visitante y las miles de especies que protegemos”, aseguran desde ATE.
Peligra la apertura de Parques Nacionales en Semana Santa
Se aproxima un fin de semana largo, donde los Parques Nacionales de las distintas provincias son un atractivo para el turismo. Sin embargo, miles de familias podrían encontrar las puertas cerradas de estos territorios por medidas de fuerza gremial. En asambleas se debate que pasos seguir para que el Gobierno frene el ajuste sobre los trabajadores estatales.
Actualmente, se están realizando movilizaciones e intervenciones artísticas en las puertas de distintos parques, donde el personal cuelga carteles e intenta visibilizar este conflicto.
“Hemos visto gobiernos pasar y hemos defendido lo que es de todos y todos los argentinos”, asegura Virginia Gallado.
Y finaliza: “Lo que estamos haciendo es abrazar la soberanía de los recursos naturales y culturales de todos”.