Aunque la cena de este martes fue a solas y ninguno emitió un comunicado público sobre lo conversado, tanto en Casa Rosada como en el PRO echaron a correr los mismos trascendidos: el presidente Javier Milei y Mauricio Macri coinciden en que la alianza sellada previo al balotaje del año pasado sigue siendo clave para mantener la gobernabilidad, pese a los temblores ocurridos en las últimas semanas con epicentro en el Congreso nacional.
Se trató de la cuarta reunión en un mes, la tercera en quince días, todas en la residencia de Olivos. La periodicidad indica la importancia que Milei y Macri le dan al acuerdo político que hasta no hace mucho le permitió al oficialismo, pese a su escasa representación en las bancas, lograr los votos favorables para avanzar con leyes clave en el parlamento.
La semana pasada cenaron el día en que la oposición parlamentaria votó contra la ampliación presupuestaria de 100.000 millones de pesos para la SIDE. El PRO fue clave al habilitar el quorum que tumbó la iniciativa oficialista. Macri esbozó aquella noche una argumentación por lo ocurrido. “Me dio las explicaciones; la verdad que no me resultaron satisfactorias, siendo alguien que fue jefe de Estado y sabe las necesidades en términos de inteligencia que tiene que enfrentar la Argentina”, dijo después Milei al periodista Antonio Laje.
La relación se tensó más al día siguiente cuando el Senado votó una nueva fórmula jubilatoria. Los senadores del PRO, igual que un día antes los diputados, volvieron a votar junto al resto de la oposición. No pocos señalaron si no había empezado “el resquebrajamiento del 56%”.
“Nosotros estuvimos trabajando durante 15 días buscando soluciones y alternativas. Con claridad, el Gobierno dijo que si votábamos el artículo 2, el 4 y el 10 lo poníamos en un quebranto. Y en el marco de esas conversaciones fue lo que se votó”, explicó el senador Luis Juez, jefe de la banca del PRO, a Radio Mitre.
Contra lo decidido por la bancada del PRO, Macri públicamente se pronunció a favor del veto presidencial anunciado por Milei. “Uno está a favor o en contra del cambio. Está mal mandar a los senadores del PRO a votar a favor de un proyecto fiscalmente irresponsable y después públicamente salir a decir que estás en contra”, lo criticó Patricia Bullrich, quien tiene su propia pelea con Macri.
La última cena apostó a avanzar sobre las desavenencias políticas. “No comieron milanesas, comieron entraña. El presidente con puré de batata, el expresidente Macri, con ensalada de zanahoria y huevo. El resto fue, como siempre, una reunión de amigos, excelente como siempre”, resumió el vocero presidencial, Manuel Adorni. El funcionario se mantuvo hermético ante la insistencia periodística sobre lo conversado en la cena. “El presidente cuando se reúne con sus amigos, no lo cuenta; son amigos desde hace muchísimo tiempo, años”, insistió Adorni. “La relación entre ellos es inmejorable”, resumió.
Los temas ásperos que rozan la relación
En Casa Rosada saben de las limitaciones políticas de Macri, sobre todo en la Cámara Alta, donde la mayoría de los senadores responde a sus gobernadores. Las agendas provinciales se priorizan a la agenda partidaria del PRO.
Con mucho menos ruido que los avatares parlamentarios, hay otro tema ríspido entre Milei y Macri. El Gobierno porteño mantiene con la Casa Rosada una pulseada por el pago de fondos coparticipables. Jorge Macri sostiene que los pagos se hacen “discrecionalmente”. A este conflicto “de caja”, se sumó la quita de subsidios nacionales a los colectivos que circulan en CABA y que se materializará desde el 1° de septiembre.
Hace un mes, cuando Macri relanzó el PRO en un acto en La Boca, hubo críticas al entorno presidencial. El asesor Santiago Caputo quedó apuntado. “El pronunciamiento público de Macri, con sus críticas al entorno de Milei y el reclamo para ser consultado para temas de la gestión, fue la novedad que provocó la serie de reuniones mano a mano. ‘Quiero hablar con vos, no con tu entorno’ fue más o menos lo que dijo Macri”, evaluó el consultor político, Lucas Romero, en charla con este medio.
El director de la consultora Synopsis dijo que en las mediciones de agosto se ve un deterioro en la imagen presidencial de Milei. “Macri considera que no fue retribuido en los términos acordados antes del balotaje y de ahí sus cuestionamientos. Milei, a su vez, sabe que esas críticas, sumadas al frente interno que le abrió Victoria Villarruel, son puntos de fuga del circunstancial 56% de noviembre del año pasado. Por eso, Milei recibe a Macri con el objetivo de organizar el oficialismo. Lo que vemos ahora es una paritaria. Hay negociaciones para ver cómo se sigue. Ya sabremos si hubo o no acuerdo”, dijo Romero.
Otra versión se agregó en los medios. Clarín publicó esta tarde que Milei ordenó al titular de la SIDE, Sergio Neiffert, que se comunique con Macri para informarle que quedarán apartados dos funcionarios de Inteligencia que pidieron información a la Justicia sobre causas que involucran al expresidente. La información dice que se le pidieron “disculpas” al expresidente. Neiffert llegó a su cargo con el aval de Santiago Caputo.