En casi 20 minutos de discurso y frente a una elevada expectativa pública por el drama ascendente de la inflación en la Argentina, el presidente Alberto Fernández sólo anunció que su gobierno hará anuncios. Y dejó a todos con sabor a nada, al menos por algunas horas más.
Eso que parece un juego de palabras es el resultado de lo comunicado por el Gobierno nacional cuando se esperaba un detallado plan de medidas económicas que lleve un poco de alivio a los hogares y empiece a dar vuelta las expectativas muy negativas que existen.
La vara la había puesto el propio Fernández esta semana cuando en un acto político en el Gran Buenos Aires prometió golpeando la mesa con su puño derecho que el viernes iba a iniciar una “guerra contra la inflación”.
En concreto, el jefe de Estado anunció en el video grabado en la Quinta de Olivos tres cosas. La primera: se constituirá un “fondo de estabilización” (que tendrá la forma de un fideicomiso) para evitar el traslado de la suba del precio internacional del trigo a la mesa de los argentinos, ya sea en el pan, los fideos o las galletitas.
Esto ya se conocía e incluso este medio lo había publicado el 3 de marzo. El Gobierno creará un fideicomiso de unos 450 millones de dólares para volcar 800 mil toneladas de trigo por año al mercado doméstico hasta 2024. Esto fue acordado el 2 de marzo por el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti; el subsecretario de Políticas para el Mercado Interno, Antonio Mezmezian; y el subsecretario de Agricultura, Delfo Buchaillot, con exportadores y molineros.
Esta herramienta permitiría, según cree el Gobierno, garantizar abastecimiento y precio de alimentos básicos como son los fideos secos y harina 000, y desacoplar precios para “proteger el consumo interno” en un contexto global de conflicto bélico, potencial escasez de productos e interrupción de la cadena de suministro, y con el precio internacional del trigo en torno a los 400 dólares por tonelada cuando hace un mes estaba en 300 dólares. Los productos incluidos en el fideicomiso se comercializarán en el marco del programa +Precios Cuidados.
En segundo lugar, dijo Fernández, los ministros del gabinete económico serán los encargados de comunicar otras medidas a partir de este sábado 19 de marzo. “Garantizar el pan en la mesa de los Argentinos es fundamental”, afirmó el Presidente.
Y en tercer lugar avisó que decidió que el gabinete económico se concentre desde este momento en implementar todas las medidas necesarias para enfrentar la inflación, en particular de la de los alimentos. Por ello, dio indicaciones a los ministros para que construyan acuerdos, pero sin dudar a la hora de aplicar todas las herramientas del Estado para evitar abusos.
Fernández dijo que se está en una situación extraordinaria que requiere de soluciones extraordinarias. Y por ello, desde el lunes convocará a los representantes de los sectores productivos, sindicatos, empresarios y la sociedad civil para “diseñar un mañana en la lucha contra la inflación”.
“No vamos a dejar de controlar y fiscalizar precios. Vamos a aplicar la ley de abastecimiento si fuere necesario”, dijo. En el mismo camino, aseguró, dialogará con cada gobernador y gobernadora y con todos los intendentes para que las medidas que se adopten lleguen a cada rincón del país.
“Necesitamos luchadores contra la especulación y la inflación en cada comercio, en cada mesa, en cada casa. Esta batalla necesita de cada uno de nosotros”, sostuvo en el video.
Fernández destacó que el Congreso haya convertido en ley la autorización para la refinanciación de la deuda con el FMI. Y dijo que la decisión de haber pedido la aprobación legislativa lo enorgullece, porque nunca más un Presidente podrá endeudarse a espaldas de los argentinos.
En ese sentido, les agradeció a los que trabajaron con “responsabilidad” para que la ley enviada por el ministerio de Economía tuviera apoyo legislativo suficiente para ser aprobado. En este punto expresó una crítica solapada a un sector de su propia coalición, dado que el kirchnerismo duro que responde a Cristina Fernández de Kirchner no apoyó la iniciativa.
“Me doy cuenta que hoy se suman nuevas tensiones a viejos desafíos que no supimos o pudimos encarar”, lamentó Fernández. Así se refirió a la inflación que afecta “hace muchos años” a la Argentina. “Llevamos diez años consecutivos con una inflación de dos dígitos”, señaló.
Aunque sin mencionarlo con nombre y apellido, Fernández cuestionó a su antecesor Mauricio Macri por haber prometido que resolvería la inflación en poco tiempo y sin embargo se fue de la Casa Rosada agravando el problema. El Presidente agregó que ahora la solución de este problema demanda de todos los sectores, aunque no mencionó a la oposición.
También dijo que el acuerdo alcanzado con el FMI permite comenzar a ordenar las variables macroeconómicas centrales en la lucha contra la inflación, a la que definió como un “fenómeno multicausal”. Para atacarla se acumularán reservas; se mejorará el crédito público; se desacoplarán los precios internos de los internacionales; se trabajará sobre las políticas de ingresos y precios al mismo tiempo; y se tomará una batería de medidas en la que múltiples son imprescindibles, dijo Fernández.
