El Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguay condenó este viernes de forma unánime a 3 años de prisión efectiva a la exsuperiora del convento de Carmelitas Descalzas de Nogoyá, Luisa Toledo, acusada de privación ilegítima de la libertad, y se estableció que permanecerá en libertad hasta que la sentencia quede firme.
El fiscal Jorge Gamal Taleb había pedido seis años y 6 meses de prisión, y la defensa dijo que no estaba "acreditada la materialidad de los hechos" ante los jueces Darío Crespo, como presidente, Javier Cadenas y Alejandra Gómez.
La exsuperiora fue la "única responsable de privación ilegitima de la libertad agravada por la utilización de violencias y amenazas y por más de un mes". Fue acusada por exnovicias y monjas que estuvieron entre 10 y 25 años en el convento por los malos tratos.
Las dos víctimas que la denunciaron "hicieron saber en forma reiterada de diferentes maneras la decisión de dejar el convento, pero Toledo ignoró, desechó y destruyó los papeles donde demostraban sus intenciones y no les permitió abandonar el recinto".
El Tribunal consideró que Toledo actuó "amenazantemente, incumpliendo e imponiendo castigos corporales que no están habilitados por las normas del convento, constituyen un exceso y algo que la imputada reconoció ante el tribunal".
En tanto, afirmaron que también Toledo "las utilizaba como elementos de sus propias autocorrecciones".
Por otro lado, los jueces indicaron que teniendo en cuenta la edad y estado de salud de la religiosa, condenaron a 3 años de prisión efectiva que "cumplirá en la Unidad Penal 6 de Paraná, cuando la sentencia quede firme".
La religiosa, de 63 años, ingresó en 1991 al convento que dirigió durante una década como la madre superiora "María Luisa" pero fue separada de su cargo por orden de la justicia.