Un colegio de Neuquén, que recibe en su comedor diariamente a cientos de alumnos y jovenes, realizará una rifa para poder pagar las elevadas facturas de luz y gas. Tan sólo este mes debe afrontar gastos que superan los 80 mil pesos en servicios.
Se trata de la Institución San José Obrero que funciona hace más de 50 años en la ciudad. Este mes recibió una factura por 60 mil pesos de luz y otros 20 mil en gas. Aunque la institución es pública de gestión privada, sólo el 30% de los alumnos abonan una cuota mensual de $700. Por lo que en los últimos tiempos no pudo afrontar los elevados costos de mantenimiento.
La escuela tiene 560 alumnos, de entre 14 y 25 años, repartidos en los tres turnos (mañana, tarde y noche). La Institución abre sus puertas desde las 7 hasta las 23 y cuenta con un comedor al que asisten alrededor de 250 jovenes que almuerzan y cenan allí. Según comentó Gastón Maina, el administrador del Colegio a Imnequén ese número va en aumento y los lunes es el más concurrido.
"Los chicos vienen con hambre, tuvimos casos de alumnos que se nos desmayan en la formación, sobre todo los días lunes. Porque vienen de no comer el fin de semana. Eso no nos lo contó nadie, sino que nos pasa a diario", expresó Maina.
Directivos y profesores del colegio organizan una rifa para poder pagar algunas de las facturas. La rifa solidaria se realizará este 16 de agosto y tendrá un costo de 300 pesos y cuyo primer premio va a ser un televisor Led, donado para esta rifa, y premios en efectivo.
Cabe destacar que el colegio tiene una subvención del Estado con el que paga el 80% del salario de los docentes. Además recibe otro aporte para el comedor. Sin embargo, con mucho esfuerzo los profesores y directivos logran que la institución educativa continué funcionando.
"Nos hacemos cargo de pagar todos los insumos para que los chicos aprendan. También de pagar todos los servicios. Pero es algo que nos cuesta pagar. Estamos juntando el dinero mes a mes para pagarlo", informó el administrador.
Además agrego: "Nosotros tratamos siempre de ayudar en todo lo que se pueda, transporte, alimentos, ropa. Recibimos a los chicos como vienen y buscamos darles todas las herramientas para que el pibe o la piba puedan cambiar su historia”.
