El proyecto “Doná música, recibí una sonrisa”, ya tiene cinco años desde su creación. Esta acción fue creada por Gabriel Mignani, un músico y profesor de guitarra que dando clases en la municipalidad de Las Heras notó que algunos alumnos consultaban si se podía aprender sin tener el instrumento.
Esta iniciativa de donar instrumentos, repararlos y darlos a personas que lo necesitan surgió de una necesidad de aquellas personas que no puede costear la compra de un instrumento musical.
“Me empecé a dar cuenta que esa pequeña problemática que era tratar de solucionar uno o dos casos se podía, empecé a pedirle a mis amigos y a solucionarlo de ese lugar que estaba buenísimo porque los pibes tenían otro acceso a la música”, confiesa Gabriel para Vía Mendoza.
De a poco las donaciones fueron siendo cada vez, porque este proyecto nunca paró. La recolección de instrumentos es durante todo el año, el objetivo que se impone el gestor de estas acciones es donar por lo menos un instrumento por semana o cada 10 días.
Este trabajo lo realiza en sus tiempo libre, tratando de congeniar una ida al trabajo y el paso para bucar el intrumento. “Es todo muy a pulmón, muy ad honorem, yo vivo de la música. Doy clases particulares, doy clases de guitarra, toco en vivo”, agrega.
Hay un trabajo que no se ve, que es el de ir a recolectar todas esas donaciones. Conseguir dinero para mandar el piano a afinar, la guitarra eléctrica a un lutier, el teclado a un ingeniero electrónico y así. Pero el músico lo hace por el deber de ayudar y generar ese cambio, insiste muchas veces en ir a buscar el instrumento para ser ese puente entre la persona que lo da y quien lo recibe.
Cuál es la mayor problemática a la que se enfrenta
La problemática que actualmente tiene Gabriel es como solventar estos gastos de arreglos, si bien hay algunas cosas que él arregla, hay otras que necesitan de un especialista que hay que pagarle. Durante estos años ese dinero salió del bolsillo del músico y profesor, pero también ha ido ingeniándoselas para hacer sorteos, rifas y conseguir ese dinero.
El único apoyo gubernamental que recibe es de la municipalidad de Las Heras, quienes donan una cantidad de plata en una casa de música para poder hacer las reparaciones.
“La música es importante porque el estudiar un instrumento que te abre un montón de posibilidades, estas desarrollando tu psiquis de otra forma, te estás interiorizando, estás estudiando un idioma nuevo, estás trabajando tu motricidad”, afirma Gabriel.
Gabriel sueña con que alguna vez otro municipio o empresa privada se sume a este proyecto solidario, porque este tipo de ayuda lograría llegar a muchas más personas, poder hacer más por ellos. “El proyecto no se va a morir, porque yo no voy a dejar que se muera” cierra.
Las personas que quieran donar cualquier tipo de instrumento o elementos que ayuden a refaccionarlos como lijas, aerosoles para pintar, pegamento cola u otro tipo de cosas, pueden comunicarse a su teléfono 261-6657096 o por redes sociales.
