“Ese deporte no es para vos, no es de mujeres”, “Te vas a lastimar”, y cuantos otros perjuicios sociales, el fútbol femenino debió derribar para, luego de 90 años, comenzar a jugar su historia dentro del profesionalismo.
La jugadora internacional y mendocina, Gimena Blanco habló con Vía Mendoza en el día Internacional del Fútbol Femenino. “Al fútbol femenino le falta, casualmente, el toque femenino que se merece y necesita”, sugirió.
El 23 de mayo se homenajea todas aquellas personas que han ido venciendo barreras en un deporte que ha sido considerado solo para hombres, así se celebra el Día Internacional del Fútbol Femenino.
El primer club de fútbol de mujeres se formó bajo el nombre de British Ladies Football Club, fundado en el año 1894 por Nettie Honeyball, una activista de los derechos de la mujer.
En 1970 se jugó el torneo internacional (no oficial) de fútbol femenino, donde Dinamarca dio la vuelta olímpica.
En el mundo juegan al fútbol más de 26 millones de mujeres
Según la FIFA existen 26 millones de mujeres que practican, juegan al fútbol de forma oficial, en 180 países, donde además hay registradas 7.000 árbitros y 21.000 entrenadoras, y como selecciones nacionales femeninas juegan más de 60 representantes de distintos países.
“Los avances en el mundo y en Argentina son tremendos en relación al fútbol femenino, pero faltan muchos detalles, y debemos luchar para conseguirlos”, subrayó Gimena quien está en Mendoza analizando su futuro.
Camisetas y pantalones adecuado a la mujer
“La mujer, en el fútbol, debe tener ropa adecuada a la mujer, no puede ser que las chicas salgan a jugar con los pantalones y camisetas que dejaron los varones de otras divisiones, sin entrar en perjuicios, es simplemente que debemos tener nuestra ropa, principalmente en inferiores”, remarcó Gimena quien recordó sus inicios.
“La jugadora de fútbol no puede ingresar a una cancha con la ropa colgando. Ese debe ser uno de los objetivos a cambiar. No soy el extremo, no defiendo a la mujer, como tampoco al hombre, solo creo en la capacidad de cada uno, sea del sexo que sea”, sentenció la jugadora internacional.
Los horarios de los encuentros, las medidas de las canchas y la imagen de la mujer en el fútbol, son los principales objetivos que encierran las palabras de Gimena para mejorar en el futuro femenino.
“Yo comencé a entrenar con chicos, varones, cuando tenía 7 años y gracias a mis padres, -Jorge Blanco- nunca me faltó nada”, recordó en sus inicios callejeros, luego en Boca de Bermejo y Atlético Argentino.
Su participación en Europa también le enseño, y aprendió avances técnicos, tácticos y de convivencia, que hoy, en Mendoza “estamos lejos”, dijo Gimena quien trabajó como técnica en el equipo de futsal del SUPE.
Los campos de juego deben ser de 85 por 45 metros
“Las canchas de fútbol deben tener medidas más chicas. Hoy estamos jugando en canchas de once, de 100 por 50 metros, medidas establecidas para el rendimiento físico de un hombre, pero al comprar la capacidad aeróbica, física de la mujer, entramos en un terreno donde las medidas para nuestro juego deberían ser 85 por 45 metros, por ejemplo”, enfatizó.
Su experiencia en Italia y Europa en general, le permitió a Gimena Banco adquirir diversos conocimientos y formando herramientas para el manejo de grupos, principalmente deportivos.
“En ese nivel me permite estar o manejar grupos de hombre, claro que en Suramérica o Argentina, las exigencias son muy fuertes, al margen que aún no se han superado diversa barreras para que esto suceda”.
Y analizó: “El fútbol es uno de los deportes más difíciles de jugar, lo hacemos con un objeto que no es parte de nuestro cuerpo - balón-, y se juega con los pies, dos de las extremidades con las que el ser humano se desplaza, corre, salta. Por eso se debe abrir un debate en relación a estos y muchos otros puntos”, sentenció.
Gimena Banco, símbolo y embajadora del deporte de Mendoza, tiene una capacidad que pretende volcar en Mendoza. Su conocimiento y experiencia hacen que sueñe con un club, o formar mediante una institución, el fútbol femenino de Salón. Desde inferiores, sin dejar de lado a los chicos.
Aprovechar tanto talento, capacidad profesional y humana, sólo depende del llamado de la dirigencia de Mendoza.