Juan Javier Carrasco retuvo anoche el título Sudamericano ligero luego de vencer a Daniel “Problema” Colombi en la velada desarrollada en Roldán, Santa Fe. Por nocaut técnico, el lasherino logró por primera vez defender la corona que había ganado en diciembre. Pese a esta alegría, Carrasco sabe que podría ir a la cárcel, para cumplir una condena por homicidio.
La victoriosa defensa de Carrasco
El Titán, como se lo conoce en el ambiente pugilístico, está pasando por un gran momento deportivo. Este sábado por la noche salió al ring a defender el título Sudamericano de peso ligero ante Daniel Alejandro Combi, un conocido que el mendocino supo vencer también en el 2021 cuando se puso en juego el cetro latino FIB. Y como en aquella vez, Carrasco ganó con superioridad sin dejarle aire a su retador, a la vez que neutralizó cada golpe.
Afirmó así por qué es el campeón de este título que ganó por nocaut sobre el cuadrilátero en diciembre pasado, cuando enfrentó en cinco asaltos a Agustín Ezequiel Quintana en el Casino de Buenos Aires. Con éste son 3 internacionales, con el mencionado latino FIB y el latino plata CMB obtenido tras la derrota a Martín Ruiz.
Cabe destacar que el pupilo de Pablo Chacón recibió un Premio Huarpe el martes pasado, como mejor boxeador del 2022, con lo cual ratifica su buen presente boxístico.
Por qué Carrasco podría ir a la cárcel
El boxeador mendocino de 30 años viene ascendiendo en su carrera deportiva pero arrastra un antecedente legal que data del 11 de agosto de 2012, por ser protagonista de un hecho policial en el barrio Alto Mendoza.
En la madrugada de aquel día, Carrasco salió de su casa a bordo de su moto, llegó a un quiosco donde se encontraba su cuñado Daniel Ahumada y tuvo una breve discusión. Este último al subirse a un auto (Renault 18) recibió dos disparos. El hombre no llegó con vida al hospital.
Los testigos indicaron que Carrasco fue quien disparó la 9mm contra su cuñado. Las pruebas en la causa, para los jueces de la Cuarta Cámara del Crimen, fueron suficientes y el boxeador fue condenado a 10 años y 8 meses de prisión.
Como la condena no estaba firme fue excarcelado en el 2015 y desde ese momento permanece en libertad y continúa su carrera boxística.
Y si bien la defensa del boxeador intentó revertir el fallo condenatorio presentando recursos a la Suprema Corte y Nación, el dictamen del Procurador General Eduardo Casal, de 2018, de la Corte Suprema se pronunció sobre la apelación extraordinaria presentada por los representantes de Carrasco y en diciembre del 2022 se concluyó que la misma es inadmisible. Por lo que con estas instancias de apelación agotadas, Carrasco podría volver a prisión a cumplir la condena.