El Día de los Enamorados es la excusa perfecta para inundar las redes y lo digital de historias de amor. Es que ninguna es igual a otra y, aunque coincidan en algún punto, todas tienen “eso especial” que las hace únicas. Ese es el caso de Eliana y María Agustina, quienes conocieron a sus respectivas parejas gracias al mundo digital y comenzaron sus relaciones a distancia.
Sin dudas, las redes sociales y las aplicaciones cambiaron la experiencia de conocer a otras personas pero no solo para pasar el rato, sino que también muchos encontraron el amor.
Ahora a las tradicionales forma de conocer a alguien, se suman Instagram, Facebook, Twitter, Tik Tok y Apps como Tinder, Happn, Badoo, Grindr, entre otras. Si bien los jóvenes fueron los precursores, ahora personas de diferentes edades se animan a incursionar en lo digital para encontrar un compañero de vida.
Una App de citas y 1.200 kilómetros de distancia
Eliana (32) es mendocina y conoció a su esposo Mariano (38), oriundo de Mar del Plata, por una aplicación de citas. “Una amiga estaba haciendo un vivo en su aplicación y allí apareció él. Parece que anotó mi contacto y al ratito me escribió. Desde ahí no dejamos de hablar”, contó la joven lasherina sobre la primera vez que habló con su pareja.
El primer contacto fue el 10 de noviembre del 2019 y de a poco entraron en confianza. Fueron paso a paso: primero mantuvieron largas charlas a través de Instagram, luego se pasaron sus números y continuaron por WhatsApp y aseguran que se escribían “a toda hora”.
Pasó un tiempo hasta que se animaron a los audios y loco de conocer sus voces y “tonaditas” por primera vez. Luego llegaron las llamadas y después videollamadas, que pasaron a ser el contacto “más directo y real” de uno con el otro.
“En todas esas charlas siempre salía el tema de vernos y conocernos personalmente”, recordó Eliana sobre el deseo de ambos de concretar un encuentro.
Pero no fue sencillo para ellos. Es que cuando tenían todo organizado para que él viaje a Mendoza, declararon la pandemia de Covid-19 y el esperado encuentro se dilató por varios meses. “Eso nos puso muy tristes porque teníamos todo preparado y no sabíamos cuándo nos íbamos a poder ver”, comentó.
“Tampoco sabíamos cómo íbamos a manejar una relación a distancia porque ya realmente era una relación lo nuestro”, resaltó Eliana. Pero nada de esto pudo con ellos. En diciembre del 2020, un año después de su primer contacto, abrieron todo y Mariano viajó a la provincia.
“Nos abrazamos y no nos soltamos más”, dijo con felicidad la mendocina al recordar el primer contacto físico que tuvieron. Incluso, él se quedó a vivir con ella y desde entonces no regresó a su ciudad.
Pero no todo concluye ahí, sino que en agosto del 2021 Mariano le propuso casamiento, justo el día de su cumpleaños, y el 19 de noviembre de ese mismo año se casaron por civil. Ambos están felices de lo que construyeron y muy seguros. Tienen muchos proyectos juntos, y uno de ellos es el de ir a conocer a la familia de él que vive en Mar del Plata.
Un vivo de Instagram y una coincidencia mágica
María Agustina (31) es de Guaymallén y Andrés (41) de Buenos Aires y se conocieron a fines de marzo del 2020 en una transmisión en vivo de Instagram de Mariano Chiesa, el locutor y actor fue el “cupido” en esta historia, aunque aún él no lo sabe.
Es que el hombre que le puso la voz a Quilmes, Mercado Libre y tantos otros comerciales, los atrajo a ambos. Pero fue una especie de programa de radio de los ‘80 que él realizaba por esta red social desde Miami en pleno confinamiento el espacio por el que Agustina y Andrés coincidieron.
Allí, los usuarios tenían la posibilidad de participar de los tópicos con sus audios y todas las noches eran los mismos quienes se conectaban a interactuar. “Éramos entre 80 y 120 personas que nos sumábamos a ‘Modo Oculto’, la mayoría del palo artístico como locutores, actores, periodistas y comunicadores. Y esto se repetía todas la noches donde teníamos una interacción constante entre las mismas personas”, contó María Agustina sobre el disparador de su relación.
Así fue que a partir de estos vivos, crean un grupo de WhatsApp masivo -una especie de comunidad- entre quienes seguían esta locura de Chiesa. “Y Andrés por alguna razón me escribió por privado días después y desde el 29 de marzo del 2020 no pudimos dejar de hablar ni un solo día. Nos fuimos enamorando de la personalidad del otro”, se sinceró.
En diciembre de ese mismo año, Andrés viajó a Mendoza para conocer a la mendocina que lo conquistó de forma virtual. “Todas las expectativas fueron ampliamente superadas, nos enamoramos mucho más y nos costó despedirnos”, resaltó Magu -como le dicen sus conocidos- sobre el primer encuentro.
Y remarcó: “Lo definimos como un encuentro mágico porque coincidimos en muchas cosas como las carreras similares, vemos la vida de una forma muy parecida y eso hizo que se afiance el vínculo”.
Recién pudieron volver a verse en octubre del 2021 en Mendoza y ella viajó para las Fiestas de Fin de Año a conocer a la familia de él.
Pese a la distancia, asegura que en el día a día mantienen un noviazgo normal, pero virtual. “Estamos muy presentes los dos en la rutina de cada uno, pero todavía no podemos solucionar las dificultades económicas para que él venga o yo me vaya. Aunque él se enamoró de mí y de Mendoza”, confesó.
Si bien las despedidas se hacen cada vez más difíciles para esta pareja, nada les impide poder ser felices a más de mil kilómetros de distancia. La clave del éxito para ellos, una buena comunicación.
“Nuestra comunicación es y siempre fue muy buena a pesar de ser virtual. Y en marzo van a hacer dos años desde el primer momento que empezamos a hablar”, cerró con alegría la guaymallina.
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