Mediante a diversos estudios de mercado y principalmente teniendo en cuenta el dólar, datos a agosto, la Fundación Ideal, dio a conocer el comportamiento de los principales sectores económicos de Mendoza.
Se puede ver claramente cómo los sectores vinculados a la exportación y el turismo se están viendo beneficiados, mientras que los volcados al consumo interno, deprimido por efecto de la inflación y pérdida de poder adquisitivo del salario, la están pasando decididamente mal.
Los bancos y el sistema financiero es una de las excepciones, ya que más allá de la recesión y pérdida de depósitos por la corrida frenética al dólar, la imposición de tasas de interés reales positivas para tratar de frenar la inflación está haciendo que el negocio para ellos florezca con un crecimiento interanual en junio del 31% en lo que respecta a préstamos al sector privado (empresas y familias).
El sector petrolero y la venta de combustibles, mantienen tasas de crecimiento aun en la actual coyuntura. La decisión política detrás, busca mantener precios relativos atractivos a nivel doméstico para que las inversiones sigan llegando, en especial a Vaca Muerta pero también a Mendoza, con el objetivo ya de larga data de reducir la importación de petróleo y combustibles, bajando así los subsidios.