El fiscal Fernando Guzzo solicitó el viernes de manera formal el cambio de calificación en la causa por el que está imputada Julieta Silva, la mujer de 30 años que atropelló y mató a su novio, Genaro Fortunato, a la salida del boliche La Mona, en San Rafael, el 9 de septiembre de 2017. Luego de un cuarto intermedio, el tribunal aceptó la solicitud la tarde de este lunes y la carátula ahora es de "homicido agravado por el vínculo".
Este delito se castiga con prisión perpetua, que sería 35 años de prisión efectiva.
La defensa de Silva había intentado demostrar que la relación era incipiente. Mientras que la familia de Fortunato aseguraba que eran una pareja consolidada.
“Viajaron varias veces juntos, fueron presentados como novios ante amigos y familiares e intercambiaron más de 6 mil WhatsApp donde hablaban de planes futuros de casamiento y hasta tener hijos”, remarcó el fiscal.
Es decir, que de ser considerada culpable, Silva podrá ser condenada por alguno de estos tres delitos: homicidio culposo (accidental y con pena menor a 5 años), homicidio simple con dolo eventual (que pudiendo evitar lo continuó y causó el daño, de 8 a 25 años en prisión) y homicidio agravado por el vínculo de pareja (pena única, al menos 35 años de cárcel).
