Edemsa, la empresa encargada de destribuir la energía eléctrica en Mendoza no pagó la deuda con Cammesa, y su saldo negativo es millonario.
Según Edemsa, la falta de aumentos tarifarios provocó demoras en sus pagos a Cammesa por la compra de energía. Esa deuda acumulada al 31 de enero de 2016 superaba los $2.000 millones. Dos años después ambas empresas llegaron a un acuerdo y se generó un plan de pagos de 90 cuotas mensuales, con una tasa del 10%.
Si bien Edemsa ha cumplido con ese compromiso, la deuda siguió creciendo porque dejó de pagar las "facturas corrientes".
En 2019, Edemsa reflejó una pérdida integral de $1.258 millones. La empresa controlada por el grupo Vila-Manzano (que el año anterior había ganado $1.130 millones) reconoció ese número rojo pese a que sobre el final del 2019 cuando no pagó parte de la energía que recibe para luego distribuirla en Mendoza.
Cammesa, la empresa mayorista que le vende la energía a Mendoza, es a quien Edemsa le debe. Al 31 de diciembre, la distribuidora mendocina que tiene casi 450 mil clientes reconoció que le debía a su principal proveedor $6.314 millones, argumentó dos motivos principales:
a) Responsabilizó al Gobierno de Mendoza por "la tardía y desactualizada readecuación de Valor Agregado de Distribución (VAD) que se hizo en junio de 2019 calculado sobre precios de diciembre de 2018".
b) Culpó a la crisis y a "las condiciones económicas, fundamentalmente la inflación". El Sol.