Los principales dirigentes del gremio de Camioneros, Hugo y Pablo Moyano, son investigados por presunta "extorsión contra empresas mineras de San Juan" a las que les reclaman una presunta deuda de más de 457 millones de pesos.
La denuncia fue presentada por las empresas Caleras San Juan, Albors, Cefas, Minera Tea y FGH SA, que denunciaron que el conflicto se originó el 19 de agosto de 2016, cuando el Sindicato de Choferes de Camiones difundió un comunicado en el que "reclamaba a las empresas mineras de San Juan una deuda de $ 457.504.429,24 en concepto de ajustes salariales y aportes a la obra social y al sindicato.
Las empresas rechazaron el reclamo aduciendo que, de existir aquellas cargas, correspondían a las compañías de transporte que eran empleadoras de los choferes y no a ellos, ya que no los unía una relación laboral directa.
La respuesta sindical demoró poco más de un mes; entre el 26 y 29 de septiembre de ese año las plantas de producción ubicadas casi en su totalidad en la provincia de San Juan, a excepción de tres instaladas en Mendoza, Buenos Aires y Córdoba, fueron bloqueadas por integrantes del gremio como forma de presión para compeler al pago. Bloqueos que continuaron en octubre.