Pornografía, brujerías y prostitución tiñen el crimen del médico en Las Heras

Será clave la declaración de los hijos de la pareja.

Pornografía, brujerías y prostitución tiñen el crimen del médico en Las Heras

El crimen del médico León Domingo Burela -ocurrido el 15 de abril en su casa de las Heras, Mendoza- sigue revelando detalles escalofriantes. El caso, que parecía ser un asesinato durante un robo, dio un giro de 180 grados la semana pasada cuando la esposa de la víctima, Elizabeth Ventura, y una amiga de ella, Mónica Castro, quedaron detenidas e imputadas. Ahora la principal hipótesis es que contrataron un sicario. 

Durante la detención de las mujeres salieron a la luz detalles de magia negra escalofriantes: Castro se dedicaba a la parapsicología y había puesto en el freezer un papel con los nombres de los policías y la fiscal que investigaba la causa para que no pudieran avanzar en la investigación. También habían fetiches y fotos. Según los abogados de Ventura, su clienta fue manipulada por Castro para ordenar el crimen.

Este jueves se conocieron más detalles del caso y la Justicia espera la declaración de los hijos de la pareja.

Los abogados de Ventura aseguran que Burela veía pornografía delante de sus hijos y los obligaba a mirar. Incluso existe la versión de que el médico tenía un fetiche con que su esposa saliera a prostituirse y luego le contara las relaciones sexuales que había tenido, aunque esta versión todavía no ha sido aportada por Ventura en la causa ya que ha preferido no declarar, informa Diario Uno.

Las mujeres se conocen hace 30 años y mantenían una relación de amistad. Desde hace unos 8 años, Ventura le pagaba un canon semanal a Castro por algunos trabajos de magia negra. Según las escuchas telefónicas, "La Bruja" -como se la apoda a Castro- le pedía plata para decirle qué color de ropa interior debía usar, entro otras cosas.