Carta sobre la menor abusada: "Usan el deseo de una niña para hacer canalladas"

Organizaciones de mujeres de Jujuy escribieron una carta con respecto a la difícil situación que está atravesando la niña y su familia.

Concetrancion en el Hospital Materno Infantil (Web)
Concetrancion en el Hospital Materno Infantil (Web)

La Casa de la Mujer "María Conti" de San Pedro de Jujuy, que acompaña y asiste a la madre y a la niña, junto a otras organizaciones de mujeres de la provincia escribieron una carta que se publicó en las redes sociales y se viralizó con respecto a la dificil situación que está atravesando la niña y su familia.

La carta completa

Usan el deseo de una niña para hacer canalladas

La historia la conocemos. Una niña abusada por un sexagenario, queda embarazada, siguieron el silencio y un embarazo que no se notaba en una contextura pequeña, donde apenas creció la panza. Meses después se develaron el abuso y el embarazo.

Siguió la firme decisión de la niña de poner fin al embarazo, acompañada de la madre. A pesar de esa firme decisión, no se realizó la interrupción en el Hospital Patersson de San Pedro. Y hasta hoy tampoco en San Salvador de Jujuy.

El deseo de la niña es que no duela, que la duerman. Y en ese deseo los lobos antiderechos hacen lo que pueden. Pueden decir que el único método es la cesárea, para dormirla y que no tenga dolor. Pero ese dolor lo sentirá después, además de seguir con la marca de una historia dolorosa que tuvo más consecuencia que el asco y el miedo.

Sabemos que usaron ese deseo, y que ocultaron que podían dormirla, que podían sacar lo que ella quiere sacar de sus entrañas en forma medicamentosa, también durmiéndola, sin dejar marcas, sin cortarla, sin que cuando le saquen la anestesia el dolor sea intenso, y cueste tomar la decisión de dar el primer paso. Su dolor podía evitarse de otra forma, pero agarraron ese dolor como si fuera la puerta al éxito, y le dijeron "microcesarea"; y de paso se dieron un tiempo para madurar pulmones, para probar si el feto vive, lo que será extraño, y de ocurrir con muchos problemas, para que después toda la culpa del embarazo no llegado a término vuelva contra ella, con toda la fuerza de la culpa con la que las mujeres hemos vivido siglos.

Dicen ILE, pero es Césarea, alejándose del protocolo. Es el engaño que conocemos una y otra vez. Historias de terror, numerosas, donde con falsas informaciones se toman decisiones equivocadas. Pero quienes deciden o decidimos, a veces no tenemos otra posibilidad, porque el médico con traje que nos da confianza, y en quien depositamos toda nuestra vida, en este caso incluso el mismísimo ministro de Salud, dice que así se cumple el deseo de la niña.

Lo mismo sale a decir Gerardo Morales, un gobernador que siempre se ubica, pero que hoy vulnera derechos, una vez más, con el consentimiento que sabemos viciado. Desde el movimiento de mujeres, sabemos que la mamá está tranquila con esta decisión. Pero también sabemos que usaron el deseo de la niña de no sentir dolor para hacer canalladas. Como cuando Nani cursó su embarazo a sus 11 años porque le dijeron que interrumpirlo era lo que la ponía en riesgo. Acompañamos a la mamá, a Nani, hoy a la niña de 12 años y a su mamá, en esta suerte tan condicionada en la que se usa todo lo que está al alcance para vulnerar derechos. Seguiremos acompañando el día después, el mes después, esperando no encontrarnos a los abogados que se movilizaron en defensa de la niña y el feto, invadiendo a la mama dentro del hospital, ejerciendo de la defensa del violador. Porque nosotras siempre estaremos de este lado, y a ellos los conocemos siempre del otro.

Firman la carta: Casa de la Mujer "María Conti", Mujeres Unidas en Lucha, CEPA, Red de Comunicadoras Feministas, Fuerza Feminista San Pedro de Jujuy, CAPOMA DD.HH, Diplomatura Universitaria en Violencia de Género, Derechos y Movimientos de Mujer, JujuyEsNoticia.com, ONG Juanita Moro, Colectiva Feminista "Ni Una Menos" Tilcara y Abogadxs por la IVE.