Este martes se están cumpliendo nueve años de un doloroso aniversario en los Estados Unidos: la masacre en la Escuela Primaria de Sandy Hook, llevada a cabo el viernes 14 de diciembre del año 2012.
Esta masacre fue un tiroteo que ocurrió en la escuela primaria local Sandy Hook de Newton, Connecticut, de aquel país, llevado a cabo por un joven llamado Adam Lanza, de 20 años.
La cronología de los hechos del fatídico día
Ese 14 de diciembre de 2012, en un momento que no se pudo establecer con precisión, Adam Lanza de apenas 20 años, mató a su madre, Nancy Lanza de 52 años, con un rifle calibre 22 Savage Mark II.
A posteriori, condujo en el auto de su madre muerta hacia la escuela de Sandy Hook, situada a unos ocho kilómetros de distancia de donde mató a su madre.
Para las 9.30 h. de aquella mañana de viernes, Lanza arriba a la escuela, la cual tenía alrededor de 700 alumnos esa mañana.
Lanza se abre camino para entrar a la escuela, disparándole a la entrada y burlando así el sistema de seguridad.
Inmediatamente, la directora del establecimiento, Dawn Lafferty Hochsprung junto con la psicóloga escolar Mary Sherlach, salen a los pasillos de la escuela para entender lo que estaba sucediendo, seguidas por la subdirectora de la institución, Natalie Hammond.
Adam Lanza no duda en disparar y a causa de esos tiros mueren tanto Hochsprung y Sherlach y a su vez, Hammond resulta herida.
Para ese momento, las 9.30 h. ya hay registro de las primeras llamadas efectuadas al 911. Pronto, tan solo cinco minutos después, la policía y los socorristas llegan a la escuela.
En ese momento, el joven asesino entra al salón de clases de la maestra sustituta Lauren Rousseau. Allí mata a 14 niños, a la profesora y a otra profesora asistente.
Después se dirige al aula de la maestra Victoria Soto, la mata y a una profesora asistente también, junto a otros seis infantes más.
Es allí donde Lanza decide suicidarse, acabando con una matanza que duró 11 minutos.
Los resultados de la masacre
Al día siguiente, la policía estatal de Connecticut, decide dar a conocer los nombres de las 26 personas que murieron a causa de los disparos, seis adultos y 20 niños, entre ellas la madre del perpetrador de los disparos, Nancy Lanza y el propio asesino, Adam Lanza.
La lista de los niños y niñas que fueron víctimas del ataque es la siguiente, con sus respectivas edades:
- Allison Wyatt, 6 años
- Ana Márquez-Greene, 6 años
- Avielle Richman, 6 años
- Benjamin Wheeler, 6 años
- Caroline Previdi, 6 años
- Catherine Hubbard, 6 años
- Charlotte Bacon, 6 años
- Chase Kowalski, 7 años
- Daniel Barden, 7 años
- Dylan Hockley, 6 años
- Emilie Parker, 6 años
- Grace McDonnell, 7 años
- Jack Pinto, 6 años
- James Mattioli, 6 años
- Jesse Lewis, 6 años
- Jessica Rekos, 6 años
- Josephine Gay, 7 años
- Madeleine Hsu, 6 años
- Noah Pozner, 6 años
- Olivia Engel, 6 años
La lista de víctimas fatales se completa así:
- Anne Marie Murphy, 52 años (maestra)
- Dawn Lafferty Hochsprung, 47 años (directora)
- Lauren Rousseau, 30 años (maestra)
- Mary Sherlach, 56 años (psicóloga)
- Rachel D’Avino, 29 años (terapeuta)
- Victoria Soto, 27 años (maestra)
Cabe destacar que 18 de los 20 niños murieron en el acto, cuando se produjo el tiroteo, y dos de ellos en el centro donde fueron hospitalizados. En referencia a los adultos, todos fallecieron en el lugar.
A su vez, Adam Lanza, el asesino, tenía 20 años en el 2012 y tras cometer esta masacre, se suicidó en el mismo recinto.
Lo que se supo después de la masacre
Para las 15.15 h. de ese viernes 14 de diciembre de 2012, el entonces presidente norteamericano, Barack Obama, ofrece un discurso televisado: “Tendremos que unirnos y tomar medidas significativas para prevenir más tragedias como esta, independientemente de la política”.
Este tiroteo fue el más masivo y mortífero en una institución educativa de la historia de los Estados Unidos, siendo a su vez, el cuarto tiroteo más letal hecho por una sola persona, luego de la masacre de Virginia Tech en 2007, la masacre del club Pulse de Orlando, en 2016 y el tiroteo de Las Vegas, en 2017.
Al día de hoy, si bien hay presuntas sospechas, no hay una evidencia probada que pueda proporcionar indicios de los motivos que llevaron a Adam Lanza a perpetrar la masacre y por qué utilizó a esta escuela como su blanco de ataque.
Cabe destacar que un informe de la Oficina del Defensor del Niño de Connecticut de 2014, describió a Lanza como a un joven con su estado de salud mental en deterioro, y que a su vez estaba fascinado con los tiroteos masivos.
Las armas con las que Lanza realizó la masacre fueron compradas legalmente por su madre, Nancy Lanza.