Este domingo, el Papa Francisco cumplió 87 años y fue agasajado por unos niños que le ayudaron a soplar una sola vela de una torta blanca. Los pequeños, que son de una clínica pediátrica del Vaticano, cantaron para el pontífice y le regalaron un ramo de girasoles, según informó Noticias Argentinas.
Más tarde, en un acto tradicional de la temporada navideña durante su discurso semanal en la Plaza de San Pedro, bendijo pequeñas estatuas del Niño Jesús sostenidas por niños que las colocarán en sus pesebres en casa.
Las decenas de niños presentes en la plaza gritaron “Buon Compleanno”, feliz cumpleaños en italiano, y mostraron carteles con el mismo saludo. Francisco nació el 17 de diciembre de 1936 en Buenos Aires como Jorge Mario Bergoglio, de origen inmigrante italiano. El 13 de marzo de 2013, los cardenales lo eligieron como el primer Papa de América Latina.
A su vez, los obispos de la Conferencia Episcopal Italia, cuyo presidente Matteo Zuppi es considerado uno de los más probables sucesores del Papa, felicitaron al pontífice destacando sus deseos de paz “en este momento en que toda la humanidad sufre el drama de la violencia”.
En un post de la plataforma X, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, envió un saludo al Papa y le agradeció su “profundo compromiso con la paz”.
El Papa almorzó con algunos colaboradores y se sabe que se concedió aprovechar el cumpleaños para saborear algunas delicias argentinas, como empanadas y dulce de leche.
Además, en el día de su cumpleaños, el Papa trabajó y lamentó con un mensaje la muerte de dos mujeres cristianas de la parroquia cristiana en Gaza por parte de un soldado israelí. Afirmó que en este territorio palestino “hay civiles indefensos” que son blanco de disparos y bombardeos.
