El líder de una secta en Kenia, conocido como Paul Mackenzie, convocó a sus seguidores a un ayuno que resultó en el suicidio masivo de casi 100 personas.
De acuerdo a PlayGround Magazine, en el bosque de Shakahola, fueron encontrados 90 cuerpos sin vida de integrantes de la iglesia internacional de la Buena Nueva, liderada por Mackenzie.
Según las fuentes, el líder de la secta, adjudicó que el lugar de 300 hectáreas era destinado para ayunar con el objetivo de “conocer a Jesús”.
Ayuno para “conocer a Jesús”
Paul Mackenzie había sido capturado el mes pasado por las autoridades tras la muerte de dos niños de su iglesia. El suceso abrió puertas a una investigación sobre el sujeto. El 14 de abril, la policía de Kenia dio con el bosque de Shakahola, el lugar donde citaba a sus seguidores para ayunar hasta la muerte.
Según el reporte policial, una de las personas se negó a recibir agua o alimentos para no romper el ayuno para “conocer a Jesús”. Esta misma acción fue confirmada por Hussein Khalid, miembro de la organización de Haki Africa.
“Rechazó absolutamente los primeros auxilios y cerró con fuerza la boca, negándose a comer y quiso continuar su ayuno hasta la muerte”, comentó Hussein Khalid.
El terrible hallazgo
Desde el descubrimiento de la secta en el bosque de Shakahola, las autoridades de Kenia han removido la tierra en la zona, donde hasta el momento, han encontrado 90 muertos.
Más hallazgos se mantienen a la espera tras denuncias a la Cruz Roja, donde se reportaron al menos 115 personas desaparecidas que eran integrantes de la iglesia.
Paul Mackenzie confesó a las autoridades que encontrarán “más de 1000 personas que fueron a encontrarse con Jesús”, una lista en donde también figuran niños.
Quién es Paul Mackenzie, autor de un suicidio masivo
PlayGround reseñó a Paul Mackenzie como un taxista que inició a predicar en 2003. El de 17 agosto de ese mismo año abrió su iglesia en Malindi y se convirtió en una secta con 3.000 integrantes.
El mismo artículo indicó que el tema predilecto en las predicaciones de Mackenzie era “el fin del mundo”. El extremismo de su secta llamó la atención de las autoridades, pero no se planteó nada para detenerlo.
En el 2017, Paul Mackenzie fue arrestado por impedir que los niños de su iglesia asistieran a la escuela, ya que consideraba que la educación no estaba reconocida por la biblia.
Cuando fue detenido por segunda vez en marzo de 2023 por la muerte de dos menores víctimas de la secta, el líder pagó una fianza de 740 para quedar en libertad.
Sin embargo, esta vez en su tercer arresto, Paul Mackenzie permanece en prisión desde el 15 de abril y tendrá que comparecer ante la justicia el próximo 2 de mayo, según los reportes locales.