En el contexto de los constantes cambios en el mundo profesional, se observa una disminución en la cantidad de trabajadores con habilidades manuales. Un claro ejemplo de esta tendencia es el de los soldadores, cuya demanda se prevé que aumente en un 40% en el futuro.
Aumentará en un 40% la demanda de soldadores
El trabajo de los soldadores es esencial en diversas industrias, como la construcción, la manufactura, la automotriz y la fabricación de estructuras metálicas. Además de soldar, también realizan tareas como la preparación de materiales, la inspección de soldaduras para asegurar su calidad y la interpretación de planos y dibujos técnicos.
Según un estudio realizado por la empresa de construcción e infraestructura Amanco Wavin, indicó que casi no hay plomeros entre 18 y 25 años en el país. También indicó una falta de soldadores y herreros. Detalló que esta crisis no ocurre solamente en Argentina, sino que a nivel global se prevé que el 40% de la demanda proyectada de soldadores no será satisfecha, lo que afectará los tiempos de los procesos productivos. Esto resultará en un aumento de los costos operativos debido a los retrasos y a una posible disminución en la calidad final de los productos.
“Uno de los factores principales que ha llevado a esta escasez de soldadores es el envejecimiento de la fuerza laboral y la falta de interés por parte de las nuevas generaciones en este tipo de trabajos. A medida que los soldadores más experimentados se retiran, no hay suficientes jóvenes interesados en reemplazarlos. Las nuevas generaciones suelen preferir carreras relacionadas con la tecnología y la innovación, dejando de lado profesiones que perciben como menos atractivas o físicamente exigentes. Esta tendencia, ha contribuido a una crisis de talento en el sector, donde la demanda supera a la oferta de manera significativa”, dijo Sergio Ferrero, CEO de GRUPO BAW.
Para contrarrestar esta tendencia, varios expertos coinciden en la necesidad de que las instituciones educativas y las empresas colaboren en el desarrollo de programas formativos que preparen a las nuevas generaciones para los requerimientos actuales de la industria. La implementación de programas de formación dual y la integración de la tecnología en el aprendizaje no solo pueden incentivar a más jóvenes a formarse como soldadores, sino que también les proporcionarán habilidades que serán valiosas en el futuro de la manufactura.
Cómo se puede resolver la disminución de los soldadores
Como respuesta a la creciente demanda, la introducción de los robots colaborativos, o cobots, transformó la industria de la soldadura. A diferencia de los robots industriales convencionales, que suelen operar en espacios aislados y son complejos de programar, los cobots están diseñados para trabajar en conjunto con los operarios, lo que mejora tanto la seguridad como la precisión en las tareas de soldadura. Además, estos cobots son más fáciles de programar y pueden ser configurados por personal con conocimientos básicos, lo que facilita su integración en diversos entornos laborales.
“Los cobots optimizan significativamente las operaciones de soldadura y corte de metales al asumir las tareas más repetitivas y físicamente demandantes. Gracias a su precisión milimétrica, los cobots pueden realizar soldaduras complejas de forma constante, asegurando uniformidad y alta calidad en cada pieza producida. Esto no solo mejora la eficiencia de la producción, sino que también reduce los riesgos de errores humanos, lo que se traduce en una reducción de costos para las empresas”, agregaron desde el GRUPO BAW.
No obstante, es fundamental reconocer que los cobots no buscan sustituir al talento humano, sino complementarlo. Aunque estos dispositivos se encargan de las tareas más repetitivas y peligrosas, la intervención humana sigue siendo esencial para supervisar, programar y ajustar los parámetros de soldadura.