En un operativo llevado a cabo en la Triple Frontera, agentes especializados de la Dirección General de Aduanas de Puerto Iguazú, descubrieron un cargamento de anabólicos de origen extranjero durante un control en el paso internacional del Puente Tancredo Neves. La carga, valuada en $805,152, estaba oculta en la camioneta de un ciudadano argentino que intentaba regresar al país desde Ciudad del Este, Paraguay.
El hallazgo tuvo lugar cuando el conductor llegó al control aduanero del puente Internacional Tancredo Neves, que conecta Puerto Iguazú con Foz do Iguazú, Brasil. A pesar de afirmar que no tenía nada que declarar, el comportamiento nervioso del argentino levantó sospechas entre los agentes aduaneros. Su evasiva actitud, como evitar el contacto visual y balbucear en momentos clave, condujo a una inspección más detallada.
Durante la requisa, los agentes descubrieron un cargamento de contrabando que consistía en 2,350 comprimidos de anabólicos, incluyendo sustancias como Stanozolol, Metandrostenolona y Oxandroland, utilizadas para el rápido desarrollo de fuerza y masa muscular. El valor total de la mercadería incautada fue estimado en $805,152.
La magnitud y variedad de los productos, todos de origen extranjero, sugieren que la importación se realizaba con fines comerciales, lo cual contraviene las normativas del régimen de equipaje. La infracción más grave detectada fue la ausencia de certificación de la ANMAT, entidad reguladora argentina, requisito indispensable para la importación de productos de este tipo. En consecuencia, todos los medicamentos fueron confiscados en virtud de la infracción a la Resolución N° 2014/1993.