Dante Di Nucci, es veterinario del Refugio de Animales Silvestres “Güirá Oga” en Puerto Iguazú, contó a Misiones Online que durante 2021, “los ingresos de animales para atención al centro estuvieron alrededor de los 550, es un número abrumador. En este año están por encima de la media de los meses equivalentes del año pasado, la tendencia es mayor”.
Actualmente el centro Güira Oga, tiene a animales en proceso de rehabilitación para devolverlos a su área y otros que no pueden ser devueltos. Estos últimos son parte del staff del plantel permanente, son los animales que la gente puede ver cuando visita el centro, esos animales integran proyectos por su alto valor de conservación de la especie. “Hoy cuentan en el centro con alrededor de 90 animales, en rehabilitación y cerca de 250 como plantel permanente”, aseguró el veterinario.
La esencia del trabajo en el refugio es la rehabilitación de los animales silvestres autóctonos de Misiones, que “llegan al centro por amenazas que afectan la biodiversidad, como el atropellamiento, el mascotismo, la caza furtiva, el uso de rifle de aire comprimido, entre otras que se relacionan con el contacto de las personas y el área silvestre, ya que en la provincia hay un límite muy estrecho, casi inexistente entre lo selvático y lo urbano”, dijo Di Nucci.
“El objetivo es poder devolver ese animal al monte, de donde nunca debería haber salido”, aseguró el profesional, y añadió que “se debe pasar por ciertas etapas que comienzan desde la cuestión sanitaria, en la que se trata de dar la calidad de vida que necesita, reparar la enfermedad o herida por la cual llega al centro. Por otro lado, se trata de trabajar en la conducta propia del animal, para que este pueda valerse por sí mismo en un medio silvestre”.
Actualmente muchos se encuentran por causas de mascotismo y atropellamiento. Con respecto a estos últimos, dijo que “lamentablemente el pronóstico del animal es malo, porque son de porte pequeños y al chocarlo los vehículos van a altas velocidades, y los daños son muchos” expresó el veterinario. Sin embargo, de los 90 que se encuentran, cerca del 85% tiene la probabilidad de volver a liberarse, aunque lleve meses. “Es un trabajo largo, arduo, muy laborioso que se realiza durante meses por cada uno de los animales”, remarcó Di Nucci.
Finalmente, agradeció a las personas que visitan el refugio, ya que se sostiene gracias a los aportes del público. “Hay que hacer un cambio conductual como ser humano, no sólo con tener cuidado en la ruta sino también aprender a coexistir con la fauna. Todos somos parte, no estamos por arriba y hay que ser conscientes de las acciones; así como pueden ayudar también se puede empeorar el mundo en el que vivimos. El cambio de conciencia y de actitudes es muy importante para poder conservar nuestro ambiente”, concluyó Di Nucci.
La reserva está abierta al público, todos los días de 9:00 a 17:30 horas. Además, se realizan paseos guiados cada media hora, los visitantes deben anunciarse en la boletería de entrada al refugio.