La presentación fue el viernes, en las instalaciones del Consejo Deliberante de Bernardo de Irigoyen. La falta de agua potable es un problema que se repite año tras años en la localidad y se agrava aún más en verano o por la falta de precipitaciones ya que son pocos los recursos hídricos con los que cuenta la Cooperativa de Provisión de Agua Potable de Bernardo de Irigoyen Limitada (Coopabil).
Este problema tendrá su solución con la construcción de una nueva represa y red de distribución, un proyecto que se trabaja hace varios años junto a organismos oficiales provinciales y nacionales. A fines del año pasado se aprobó, se licitó y adjudicó la obra, que ya se empezó a realizar los primeros trabajos de su ejecución, con un plazo estimado de terminación de dos años.
El proyecto es financiado por el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamientos (ENOHSA) y será ejecutado por el Instituto Misionero Aguas y Saneamientos (IMAS) a través de una empresa adjudicataria. La nueva represa para la toma de agua en la confluencia de los arroyos Barracón y Gramado en la zona rural del municipio, tendrá una cañería de impulsión, tres estaciones de rebombeo para salvar la diferencia de elevación entre la toma y la planta potabilizadora. Ademas se hará una remodelación y ampliación de la actual planta potabilizadora.
También esta previsto un sistemas de reserva con tanques elevados y cisternas en puntos estratégicos de la ciudad con el fin de distribuir la presión necesaria a toda la localidad con una red de distribución integral con conexiones domiciliarias y medidores incluidos. Actualmente, Bernardo de Irigoyen cuenta con un sistema hidráulico obsoleto, desde hace más de cuatro décadas.
Fuente: Irigoyen Informa