Tras reconocer su culpa ante el Tribunal Penal 2, un hombre de 49 años del municipio de Puerto Rico recibió una sentencia de tres años de prisión efectiva en la UP-1 de Loreto. El hombre fue acusado por violar a sus hijas de 11 y 14 años entre 2002 y 2005.
La causa estuvo doce años, en el Juzgado de Instrucción de Puerto Rico. El hombre que fue denunciado en el 2008 por abuso sexual por la madre de las niñas, aceptó el juicio abreviado y firmó la propuesta del fiscal Martín Alejandro Rau por "abuso sexual calificado por el vínculo sin acceso carnal".
El proceso se dió en pleno aislamiento social por la emergencia sanitaria por lo que se acudió a la utilización de la herramienta tecnológica de la videoconferencia. Participaron el fiscal, jueces camaristas, secretarios, acusado y su abogado defensor.