Este miércoles, personal de la Aduana secuestró una colección de billetes usados en los campos de concentración nazis que estaban valuados en más de U$S 120.000.
Estas piezas de valor histórico son monedas que datan del siglo XVIII y además billetes que utilizaron prisioneros de la Segunda Guerra Mundial.
El accionar del personal aduanero hizo que se desarticulara un contrabando de estas piezas valuadas en U$S 120.000, provenientes de un buque que ingresaba desde Colonia, Uruguay. Lo encontrado corresponde a billetes ucranianos y alemanes.
La Dirección General de Aduanas llevó a cabo un control vehicular en el desembarque del Superferry Express, para luego centrar su atención en un vehículo en particular de la marca Chevrolet. El hallazgo se logró a partir de una guía aduanera y una perra entrenada.
La alerta de Interpol
El procedimiento fue un éxito a raíz de una alerta que había recibido la Aduana por parte de Interpol. Quien conducía el vehículo era un ciudadano argentino acompañado de su pareja. El organismo internacional había alertado a la Aduana sobre el hombre, quien tenía tres causas penales.
Meses atrás, Aduna también había recibido un oficio judicial de manera electrónica sobre ese mismo ciudadano argentino, vinculado a la importación de piezas numismáticas.
Por ello mismo, las fuerzas de seguridad examinaron el auto en cuestión. La pareja, originalmente, comentó que no trasladaba bienes para declarar. Tras la pesquisa del automóvil hicieron los hallazgos.
A través de una orden de la Justicia Penal Económica, se secuestraron los billetes y monedas y se procedió a detener a los imputados, prohibiéndoles la salida del país.
La mercadería secuestrada de gran valor histórico
Uno de los billetes que se secuestraron tenía una leyenda: “Este bono solo es válido como medio de pago para los prisioneros de guerra y solo podrá ser gastado y recibido por estos dentro del campo de prisioneros de guerra o en el caso de jornadas laborales en las oficinas de compras expresamente designadas a tal efecto. Solo podrá ser canjeado por moneda de curso legal en la oficina de gestión del almacén correspondiente. Los infractores, imitaciones y falsificaciones serán sancionados. Jefe del comando supremo de la Wehrmacht”.