Las últimas medidas económicas aplicadas por el Gobierno nacional continúan recogiendo el rechazo del empresariado y analistas económicos, mientras se espera que en las próximas horas el FMI comunique la elevación al Directorio del documento que habilite el giro de fondos para socorrer las arcas del Banco Central.
Asimismo, la falta de claridad acerca de la instrumentación de los impuestos sobre importaciones trabó el comercio internacional y frenó el ingreso de insumos en la mayoría de los sectores.
La complejidad de la norma lleva a que muchas operaciones se retrasen y por estas horas los ojos se posan en la Secretaría de Comercio, ya que el titular de la dependencia, Matías Tombolini, es quien define la categoría en la que ingresarán y en consecuencia el valor del dólar a pagar.
En tanto, la Cámara de Comercio y Servicios (CAC) se sumó a las entidades empresarias que cuestionaron la batería de anuncios económicos que se produjeron desde el viernes pasado.
Puntualmente la CAC apuntó al adelantamiento del impuesto a las Ganancias y elevó una carta al titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Carlos Castagneto, pidiendo su derogación.
“Se insiste en poner la totalidad del ajuste que requiere la economía nacional en cabeza del sector privado”, advirtió la entidad.
Por su parte, el Instituto para el Desarrollo Empresarial de la Argentina (IDEA) manifestó su “preocupación” por las medidas tomadas porque “tienen un impacto negativo” en la actividad empresarial.
“Los cambios de alícuotas y la imposición de nuevos gravámenes atentan contra dos de los principales problemas que condicionan el crecimiento de la economía argentina desde hace tiempo: los cambios permanentes de las reglas de juego (esta medida afecta contratos ya establecidos) y la altísima presión fiscal”, sostuvo IDEA.
Por su parte, la Fundación Libertad y Progreso publicó un informe en el que sostuvo que la última batería de impuestos sobre las importaciones convirtió al país en “líder” de la región en este tipo de gravámenes.
“El país se ubica con un impuesto promedio sobre las importaciones superior al 23%, el más alto en toda la región y entre los más altos a nivel mundial”, afirmó el trabajo realizado en base a datos de la Organización Mundial del Comercio.
“El Gobierno persiste en su estrategia de llegar a diciembre con más impuestos y con deuda. El más perjudicado ha sido el comercio exterior, que por su facilidad de cobro suele llevarse la mayor presión impositiva. Con esto, se ha profundizado la tendencia proteccionista de Argentina, encareciendo las importaciones, la competitividad y, en consecuencia, las exportaciones”, sostuvo Eugenio Martí, economista jefe de Libertad y Progreso.
Dólar en alza
En medio de este contexto el dólar retomó el sesgo alcista. Luego de una jornada de alivio, el “blue” recuperó casi $10 y cerró este miércoles a $546.
En la plaza financiera nuevamente hubo una fuerte intervención por intermedio del Banco central y el MEP culminó a $503,90 y el Contado con Liquidación a $527,72.
Con una devaluación de 0,19% la cotización oficial quedó en $285,90.
Con el comercio exterior muy trabado por las dudas que generan las últimas medidas anunciadas, el Banco Central compró US$123 millones y vendió 250 millones en yuanes. De esta forma, el saldo mensual pasó a ser positivo en U$S61 millones, mientras que se vendieron 8.029 millones de yuanes.
En otro orden, el Banco Central confirmó la postergación del informe Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) para luego de las elecciones.
Este trabajo se comunicaba el primer viernes de cada mes pero desde agosto pasará a darse a conocer el mismo día en que el Indec difunde la inflación del mes anterior.
En consecuencia, el mes próximo tanto la evolución de los precios como el análisis de las consultoras se conocerán el martes 15, luego de las elecciones PASO.
“Se cambió la fecha de publicación del REM por los yerros de las consultoras en las estimaciones de inflación de los últimos meses. Ahora se va a publicar el mismo día que el IPC, así dejan de pronosticar la inflación que pasó y se concentran en la que viene. Armado como estaba, las consultoras quedaban expuestas a opinar sobre cuál había sido la inflación del mes anterior dos o tres días antes de que salga el dato oficial”, explicaron desde el BCRA.
A la espera del FMI
Las operaciones financieras estuvieron condicionadas a la negociación con el FMI. Según había anunciado el ministro de Economía, Sergio Massa, “entre miércoles y jueves” el Directorio el FMI recibiría el “Staff Level Agreement” con la recomendación de aprobación de la reformulación del programa que incluye un desembolso.
Cumplido el primer día del plazo, se espera que finalmente este jueves se dé a conocer la firma del documento. Este resulta un trámite fundamental para que llegue el desembolso en la segunda mitad de agosto tal como prometió Massa, porque el lunes entra el organismo entra en receso.