El mercado financiero dejó una alerta ante las complicaciones políticas que atraviesa la “ley ómnibus”, con un alza de los dólares financieros y una fuerte caída en el mercado accionario y de bonos.
Las expectativas de los operadores estaba centrada en cómo responderían los agentes económicos en el inicio de la semana, luego de la decisión del Gobierno nacional de retirar el capítulo fiscal de la “Ley Bases”.
En dólar blue transitó por una jornada tranquila al cerrar en $ 1.225 para la venta, con un leve avance de $ 5 con relación al cierre del último viernes.
Con el dólar mayorista en $ 825,30, la brecha con el blue es de 48%, aún en términos razonables para los planes del gobierno, según entienden analistas financieros.
Donde se observó una mayor inquietud fue en la plaza financiera, donde el MEP subió 2,6% a $ 1.210 y el Contado con Liquidación avanzó 2,5% a $ 1.261.
Mercado financiero cauto
Las cotizaciones a futuro operaron con estabilidad quedando para fin de mes $826,70 (32% TNA), febrero $856 (44% TNA).
En ese contexto el Banco Central adquirió US$ 84 millones y las reservas brutas treparon a US$ 25.157 millones.
Por su parte las acciones de la Bolsa de Comercio, registraron con mayorías de bajas y en consecuencia el índice Merval retrocedió 1,5%
Un panorama similar se observó con los ADRs de acciones argentinas en Estados Unidos, con los bancos Macro y BBVA liderando las bajas con retrocesos 4 y 3%.
Los títulos de la deuda pública también registraron una tónica pesimista, siendo la baja de 3,9% del AL41D la más significativa. De esa forma, el Riesgo País que había perforado los 1900 volvió a subir para terminar en 1.920.
El saldo del día muestra a un mercado financiero cauto, pero que aún percibe al Gobierno decidido a cumplir con el equilibrio fiscal.
“El Gobierno reafirma el camino hacia el déficit cero. Ese es nuestro norte y no lo vamos a modificar. Tiene el sentido de terminar definitivamente con la inflación en la Argentina y estamos haciendo todo lo que está a nuestro alcance para que eso se cumpla””, reiteró el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su conferencia de prensa diaria.
La voz de Adorni sonó en respuesta a las diferentes opiniones que circularon durante el fin de semana que ponían en duda la capacidad y las opciones que tiene el Gobierno para equilibrar las cuentas.
El movimiento del BCRA
Mientras tanto, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, avanzan en el plan conjunto para sanear el balance de la entidad.
En esa línea desde mañana avanzarán en dos operaciones clave: por un lado licitarán tres bonos para recompra de deuda del BCRA e iniciarán la quinta licitación de Bopreal serie 1 que culminará el miércoles.
Mañana el ministerio de Economía, licitará tres bonos del Tesoro Nacional y con lo producido cancelará deuda del BCRA.
Los títulos ajustan por CER, tienen cupón (no tienen pago periódico de intereses, sino que estos son abonados en su totalidad en el momento de su amortización) y vencerán en junio de 2026, 2027 y 2028.
“A priori lo más interesante es la intención de aumentar plazos, con bonos cero cupón (no engrosa la línea de intereses, por lo cual no complica el resultado financiero), en un contexto de potencial debilidad en todo el universo de pesos”, señaló Pedro Siaba Serrate de PPI Finanzas.
De esta forma el Gobierno avanza en el proceso de migración de los pasivos del BCRA al Tesoro Nacional.
En las últimas horas circuló un informe de la consultora 1816 que sostuvo que “de mantenerse las tasas de pases y, utilizando la inflación proyectada mes a mes por el REM del Banco Central (encuesta de opinión de analistas), hacia fines de mayo 2024 los pasivos del BCRA a precios constantes caerían a niveles de 2003″.
En un segundo paso de este proceso, mañana el BCRA licitará la quinta y última etapa del Bopreal Serie 1, el bono diseñado para normalizar la deuda con importadores.
En las cuatro licitaciones previas hubo suscripciones por US$ 4.096 millones, sobre una emisión total de US$ 5.000 millones. De esta forma quedan para tomar US$ 904 millones. Cabe recordar que este tramo del bono cuenta con una serie de beneficios que busca incentivar a las grandes empresas a adquirir el título.
La deuda total con importadores estimada luego de una serie de ajuste sería de U$S 28.800 millones.