River Plate se enfrentó a un partido decisivo este martes por la noche en su camino hacia los octavos de final de la Copa Libertadores. El estadio Más Monumental repleto fue testigo de una muestra de contundencia del equipo de Martín Demichelis, que venció 2 a 0 a The Strongest de Bolivia y selló su pase a la siguiente ronda.
El encuentro, válido por la sexta y última fecha del Grupo D, contó con el arbitraje del uruguayo Gustavo Tejera y fue transmitido por Fox Sports y Telefe.
Hasta esta noche, River ocupaba el segundo lugar en su zona, empatado con Sporting Cristal de Perú, ambos con siete puntos. Sin embargo, se encontraban a dos puntos del líder Fluminense de Brasil, que acumulaba nueve puntos. Por lo tanto, una victoria era fundamental para asegurar su pase a la siguiente fase.
A su vez, The Strongest llegó a este encuentro en el último lugar de la tabla de posiciones, con seis puntos. En la jornada anterior, el equipo boliviano sufrió una derrota en casa por 2 a 1 ante Sporting Cristal.
Cómo fue el partido de River-The Strongest
El “Millonario” fue protagonista desde el primer momento, tomando las riendas del encuentro en un partido que, sin dudas, lo obligaba. Sin embargo, los bolivianos no se la hicieron fáicl a Franco Armani, que en ocasiones fue figura.
En tanto, Nicolás De la Cruz fue el primero que le dio trabajo a Guillermo Viscarra, y a los 12 minutos, en una gran combinación colectiva, fue también el uruguayo quien tocó atrás para que Rodrigo Aliendro ingresara al área rematando bajo y a la izquierda del arquero.
Ya en el segundo tiempo, River no tuvo una performance cómoda como para llegar rápido al segundo gol. Hubo un cabezazo de Nacho Fernández que no fue efectivo y un tiro de Miguel Borja que tapó Viscarra. En ese trajín, Robert Rojas salió lesionado.
Ya los 44′, Pablo Solari desbordó por derecha y envió el centro atrás para Esequiel Barco, quien definió al cuerpo del arquero. Otra vez Solari tomó el rebote pero en lugar de buscar arco, habilitó a Borja, quien anticipó a Viscarra para conseguir el tan ansiado segundo gol que llevó tranquilidad al equipo, poniéndole el sello al pase de ronda.