El juez de Garantías, Gustavo Vallejos, de la ciudad de Esquina hizo lugar a la petición del fiscal, también de esa localidad, Javier Mosqueda, de mantener detenidos a un hombre y una mujer por la presunta venta de vacunas anticovid-19.
Ilícito que se habría cometido en el hospital provincial local. El hombre es un enfermero y la mujer es la jefa del sector enfermería. Están bajo arresto desde el pasado 9 de mayo y seguirán en esa condición por otros 10 días más. Fue ése el pedido expreso del fiscal en la causa para seguir recolectando pruebas y elementos del caso.
Hubo un tercer arrestado que fue el presunto comprador de la vacuna. Un reconocido comerciante local quien recobró su libertad al otro día de la detención, el 10 de mayo pasado.
Mutismo y costo de vacunas
La Justicia provincial mantiene mutismo por la causa. Lo poco que se sabe es a cuánto cotizaban las vacunas: Sputnik-V $9.000 y la Sinopharm a $8.000.
Según trascendidos en la localidad se habrían comercializado 200 dosis, pero este dato no fue confirmado ni rechazado por las autoridades judiciales ya que no brindan información sobre el caso.
Escándalo y denuncia
El caso fue escandaloso y se conoció el pasado 8 de mayo cuando el director del Hospital San Roque de Esquina, en el extremo sur de la provincia a 300 kilómetros de la Capital, denunció formalmente ante la Justicia provincial que en el centro asistencia se habrían vendido vacunas anticovid-19.
A las pocas horas hubo tres arrestos: los presuntos vendedores, un enfermero y la jefa del sector enfermería del hospital más el supuesto comprador. Y un conocido comerciante de la localidad quien habría comentado en una reunión familiar, que se había vacunando tras comprar la dosis.
De ahí, de ese comentario en la reunión, trascendió la información del supuesto ilícito hasta llegar al director del Hospital quien hizo la denuncia en la Justicia provincial.