Para las personas del interior cuando visitan la ciudad de Buenos Aires les parece un mundo aparte por las diferentes costumbres, o porque al hablar se expresan con palabras que los porteños no utilizan cotidianamente. En esta ocasión, el usuario Milton Roses hizo un hilo de Twitter con 31 recomendaciones para aquellos provincianos que visitan CABA, con total humor.
Por supuesto que no son recomendaciones de lugares, hospedaje ni precios, sino que es una “guía” para los otros correntinos, como él, que viajen a CABA y puedan tener un estadía sin sorpresas. En el tweet expresó: “Voy a ir dejando tips para los compatriotas correntinos que vengan a Caba”.
“Si un autóctono te dice que algo ‘Queda acá cerca’ no lo tomes literalmente. Nada queda cerca de nada acá. El quiosco de la esquina queda a 3 cuadras”, escribió el joven. También se refirió a la capacidad de exagerar de los “autóctonos” como el usuario nombra a los nacidos en Capital Federal. Otro de los tips fue: “Los ‘Bosques’ de Palermo son una plaza grande. No necesitás llevar carpa”.
Los tips para correntinos que visiten la ciudad de Buenos Aires
- “Si entrás a un quiosco y hay una bolsa de bizcochos abierta sobre el mostrador no te podés servir nomás. Parece que está mal visto”.
- “En las verdulerías tienen las frutas verduras envueltas en papel film porque la cáscara no parece ser suficiente acá. No rompas el papel film, pedile al verdulero”.
- “En algunas esquinas tienen rejas tipo corral. No saltes, tenés que ir hasta mitad de cuadra donde están pintadas unas líneas blancas”.
- “Si ves una franja verde pintada en la calle tené cuidado por hay gente andando en bicicleta. Es más probable que te atropelle una bici que un auto, porque los autos frenan en los semáforos”.
- “Si le decís «chamigo» al taxista te cobran una tarifa preferencial. Es más cara que la común”.
- “En las panaderías tienen un coso que se llama «Pan de queso» que parece chipá, pero no es chipá. Eviten comerlo a toda costa, se van a poner tristes”.
- “Los porteños pronuncian un montón de consonantes. No se asusten. El castellano es así, en realidad”.
- “Algunas cuadras son muy largas y otras muy cortitas. Es un misterio cuántos kilómetros son, en realidad, 20 cuadras”.
- Los mozos te van a decir «Dale», pero nunca te aclaran dale qué. No preguntes.
- Tratá de no quedarte mucho tiempo quieto en algún lugar o se va a armar una fila.
- Los «Bosques» de Palermo son una plaza grande. No necesitás llevar carpa.
- Si un autóctono te dice que algo «Queda acá cerca» no lo tomes literalmente. Nada queda cerca de nada acá. El quiosco de la esquina queda a 3 cuadras.
- Los autóctonos dan un solo beso. No tires la mejilla para el segundo, vas a queda cabeceando el aire o, en su defecto, la frente de la otra persona, todo depende de para dónde se mueva.
- Es común que los hombres te saluden con un beso, incluso, a veces, un abrazo. No tengas miedo, no es que te quieran robar. Bueno, depende, si te quiere abrazar alguien que no sabés quién es capaz sí te quiere robar. Es contextual.
- A los que vengan en invierno: si un autóctono te dice que a la noche va a hacer frío, significa que va a hacer mucho frío. Por el contrario, si te dice que «va a estar lindo», significa que va a hacer mucho frío.
- Los porteños desconocen palabras importantes del castellano como Nio, Peina, Catú, Angá, Nae, Angaú y Ñembotavy. Con ellos tenés que hablar un castellano más básico.
- La mayoría de los porteños no tiene un chamamé favorito. No intentes sacar conversación por ahí.
- En las pizzerías de acá no hacen pizza correntina. Me dijeron que sólo nosotros le decimos así, pero yo no creo que sea verdad. Todas las otras variedades clásicas sí tienen.
- Si venís en auto tené presente que hay muchas calles en ese. En esas calles tiene prioridad de paso el que le tiene menos miedo a la muerte.
- IMPORTANTE: acá, «siesta» es dormir un lapso de tiempo breve en cualquier horario, no la franja del día que va de las 13 a las 16. No uses «la siesta» como una referencia temporal objetiva, vas a generar confusión.
- Otra complicación temporal. Para algunos porteños «la tardecita» es «temprano a la tarde» y no el atardecer. Lo mejor es decir horas específicas porque no saben dividir el día en sus partes correctas.
- El porteño encuentra la tonada litoraleña un poco dulce, si a eso le sumás que la mayoría piensa que somos ingenuos tenés terreno fértil para delinquir.
- Ciudad de Buenos Aires es el último lugar del planeta donde todavía puede verse al perro pequinés en su hábitat natural: el regazo de una señora paqueta. Si te cruzás alguno de estos individuos no intentes acariciarlo porque muerde. Los perritos también.
- “Si caminas con cara de enojado hay menos chances de que los autóctonos se den cuenta de que no tenés la menor idea de donde estás”.
- “Si venís caminando en paralelo a la bicisenda y le da verde a la bici, te da verde a vos, pero al de la bici parece que no le avisaron así que manejate con cuidado”.
- “A los porteños les gusta mucho comer pizza, pero más les gusta recomendarte pizzerías. Tienen sus pizzerías favoritas y están emocionalmente ligados a ellas. Se recomienda ser empático al respecto”.
- “El autóctono tiene un anclaje emocional profundo con su barrio. Alegan saber dónde comienza uno y termina el otro. Vos hacé de cuenta que entendés”.
- “El obelisco no hace nada particularmente interesante. Es un coso blanco y alto que podés mirar nomás”.
- “Si pronunciás la LL como i de manera forzada podés tener a cualquier grupo de autóctonos entretenido por horas”.
- “Quedate tranquilo, no te están gritando.”
- “Siempre que comentes que algo te pareció rico el porteño te va a responder “eso es porque no probaste la de tal lado, tenés que probar la de tal lado”. “Tal lado” siempre queda a 127 cuadras.