La semana que pasó fue de temperaturas muy elevadas, en la mayoría de los días el termómetro estuvo por sobre los 35 grados. Un vecino de la ciudad de Corrientes todos los días pasaba por el lugar de entrenamiento de la división canes de la policía provincial.
El hombre se percató del padecimiento de los animalitos y decidió donar una pileta para que los perros se refresquen los días de calor sofocante. Es en el mismo lugar donde realizan sus entrenamientos y viven cotidianamente.
Desde la División Canes K-9 agradecieron a Carlos Escalante, quien se encargó que los canes tengan donde combatirle al verano intenso.