Un batalla campal se desató en al final del encuentro que sostuvieron Comercio de Villa Dolores y Club Social Travesía, por la quinta fecha del Torneo Provincial que organiza la Federación Cordobesa de Fútbol. Por la Zona 9, Sub zona A del certamen.
El partido terminó empatado 2 a 2, pero lo deportivo quedó de lado porque el árbitro del cotejo, Mario Rojo Casal, y sus asistentes, Santiago Gudiño y Danilo Nievas, fueron agredidos por jugadores descontrolados de Travesía, furiosos por el empate sobre la hora del dueño de casa, por un penal.
“Fue un partidazo y es una lástima que se arruinara de esta manera. Iba ganando 2 a 1 la visita y al final hubo un penal para el Comercio. El jugador número ‘3′ tocó la pelota con la mano y no se quejó, porque sabía que era penal. Ahí comenzaron algunos disturbios entre jugadores”, explicó Gudiño en Mundo D.
“Cuando termina el partido los jugadores visitantes vienen a reclamar por una expulsión y un penal en el primer tiempo que no fue. Cuando ingresan los suplentes al campo se inician los disturbios. Me arrojaron una patada a la altura de la pantorrilla y me pegan una trompada a la altura de la clavícula. Allí empiezan a venirse todos, eran 17 jugadores contra nosotros tres”, añadió sobre las agresiones.
Y completó: “Tratamos de frenarlos y cuando vamos retrocediendo, yo voy a abrir el túnel que estaba cerrado... En ese momento, al árbitro principal lo golpean, lo voltean, le pegan una patada en el piso. Pero logramos ingresar en el vestuario”.