Cinco delincuentes disfrazados con uniformes policiales ingresaron el pasado lunes a una vivienda familiar de la zona de Camino a 60 Cuadras. Los poliladrones -como se los conoce vulgarmente- simularon desarrollar un allanamiento para poder ingresar a robar.
Uno de los ladrones iba de traje, camisa y corbata. Otro, llevaba puesto un chaleco antibalas con la inscripción “Policía de Córdoba”. Mientras que los tres restantes vestían ropa y gorras azules, similares al uniforme policial. Los ladrones se pararon fente a la puerta de ingreso a las 6.30, los atendió el dueño de casa, un productor de papas, quién se asomó y los reos le dijeron que iban a realizar un allanamiento. El de traje simuló tener una orden firmada por un fiscal.
Cuando el propietario les dio paso, él, su esposa y sus tres pequeños hijos fueron inmovilizados inmediatamente con precintos. Con el dominio total de la situación, los poliladrones comenzaron a revolver cada rincón del domicilio. Y pronto cargaron todo lo de valor que iban encontrando en los dos vehículos de la familia, una camioneta Ford Ranger blanca y un auto Toyota Corolla gris oscuro.
Alrededor de 25 mil pesos en efectivo, 400 dólares, una escopeta 12/70, una pistola Bersa 380, dos computadoras y cinco teléfonos celulares forman parte del botín con el que se alzaron los ladrones, además de los rodados.
Horas después, el Toyota Corolla fue localizado abandonado en barrio Colón. Mientras que, la camioneta fue recuperada también tras ser abandonada, en barrio Vipro. De los delincuentes y los objetos robados aún no hay noticias.