“La mayoría de los equipos juegan de una manera de local, y muestran otra cara de visitante. Salvo los tres de arriba, que mantienen su forma de jugar, el resto se resguarda más fuera de su cancha”. La reflexión de Nicolás Meriano, aparición en la defensa de Belgrano en Primera, y en alusión a la merma del equipo cuando sale de Córdoba.
Y argumentó: “Miró la dos tablas, de local estamos muy bien, y de visitantes no la campaña no está tan mal. Perder en la Bombonera, y... es Boca. Contra Platense la imagen que dejamos fue fea, nos fuimos re calientes, trabajamos y pudimos revertirlo ante Vélez”, declaró en Vía Córdoba.
De todos modos, reconoció que la fuerte autocrítica de Pablo Vegetti les llegó. “Las palabras de los referentes siempre movilizan, sabemos que tenemos que mejorar. Nos toca un rival difícil, porque Defensa y Justicia pelea con nosotros arriba en la tabla. Es una semana larga y vamos a llegar preparados para cambiar la imagen”, aseguró con la mira en el Halcón, este martes 13 a las 18.
En cuanto a su juego, el zaguero central de 22 años y 1,90 de estatura, expresó: “Con el correr de los partidos me siento más cómodo, con la confianza que me transmite el cuerpo técnico. Nos tocó rotar mucho en defensa, se movió mucho por suspensiones y lesiones, pero respondimos bien”.
LA MENCIÓN A TALLERES Y LA COMPARACIÓN CON BELGRANO
Cuando Nicolás Meriano habla del rendimiento de los tres de arriba en la tabla, se refiere también a un Talleres que pelea los primeros puestos. Y que de todos modos, en lo que va del torneo no se despegó demasiado de Belgrano.
“Es muy bueno lo nuestro, viniendo de la segunda categoría y en nuestro primer año en Primera. Estamos haciendo una gran campaña”, resaltó el defensor Pirata.
EL CAMBIO DE OBJETIVO Y LOS DELANTEROS MÁS DÍFICILES DE MARCAR
“Se subió la vara, los objetivos cambiaron. Queremos terminar lo más arriba posible, no estamos lejos de meternos en una copa internacional, y eso nos aleja del descenso, que era el primer objetivo”, planteó Meriano.
Consultado sobre la adaptación a Primera y las dificultades que encarnan los delanteros de jerarquía, respondió: “Me salvo de tener que marcar a Vegetti... el año pasado en los entrenamientos lo sufrí un montón. El más difícil hasta ahora fue Borja, en el partido con River. Con Pratto no fue tan mano a mano en el partido con Vélez, porque salía mucho del área.