Lola, la heroína de cuatro patas que salvó a su familia del incendio de su casa en Córdoba

La gata fue adoptada hace un mes y medio y sus maullidos evitaron una fatalidad.

Lola, la heroína de cuatro patas que salvó a su familia del incendio de su casa en Córdoba
La gata despertó a su familia justo a tiempo.

Lola es una gata que fue adoptada hace poco más de un mes por una familia que vive en el barrio Pueyrredón la ciudad de Córdoba. Por un cortocircuito en el garaje, un incendio comenzó mientras todos dormían, pero ella despertó a su familia justo a tiempo y la salvó de la muerte.

El hecho ocurrió a principios de octubre en la vivienda ubicada en las calles Buchardo y Polonia donde viven Angie, Gustavo y Mia. “A Lola la adoptamos hace un mes y medio porque teníamos un gato y había muerto hace poco”, contó la adolescente de 14 años en diálogo con El Doce.

Lola, la heroína de cuatro patas.
Lola, la heroína de cuatro patas.

Esa madrugada, Lola comenzó a maullar al percibir la presencia del fuego dentro de la morada que la acogió. ”Cuando me desperté, intenté prender la luz para ver qué pasaba”, contextualizó la menor que se encontró con las llamas que llegaban hasta el techo de su hogar.

“LOLA NOS SALVÓ LA VIDA A LOS TRES”

“Empecé a gritar, desperté a mis padres y salimos corriendo. Lola nos salvo la vida a los tres y si no fuera por ella no la estaríamos contando”, recordó entre lágrimas la chica que hace una semana no asiste al colegio.

El fuego consumió todas las pertenencias materiales de la familia: ropa, electrodomésticos, muebles. No obstante, desde la Municipalidad confirmaron que la estructura se salvó y les brindaron 250 mil pesos para “comenzar de nuevo”, según dijo Angie, la madre de la familia.

La familia de Lola.
La familia de Lola.

La mujer es masoterapeuta y no puede ejercer su profesión porque perdió su cabina donde realizaba las sesiones. “Todo está quemado y lleno de hollín”, explicó conmocionada la mujer que agradece la ayuda de los vecinos.

Comida, ropa prestada y nos ayudaron a reponer parte de las conexiones y servicios de la casa”, contó la madre que vivió “una pesadilla” y se instaló en la casa para que no sea ocupada. Su marido, Oscar, es el hijo de Alejandro Bonome, un reconocido artista local que falleció en enero de 1995.

Ahora, la familia busca vender los cuadros que no se perdieron en el fuego para salir adelante de esta horrible situación y para que la joven Mīa recupere su vida normal lo más pronto posible.