Ganó Talleres, se puso a un punto de la cima en la Zona A, y parece decidido a mezclarse entre los protagonistas. Goles de Juan Gabriel Rodríguez y Federico Girotti para el 2 a 1 sobre Argentinos, pero más allá de todo esto, el triunfo sobre el Bicho tuvo nombre propio: Rubén Botta.
Es que el talentoso volante ingresó en el segundo tiempo (rotación mediante por parte de Walter Ribonetto), y le cambió la cara a Talleres, que en los 10 minutos finales revirtió un partido complicado. Fundamentalmente, por el desparramo que armó en el segundo gol, dejando desairado a su marcador y con centro que fue pase gol para Girotti.
Esa imagen, con Botta recostado sobre la derecha y sacando a pasear a Sebastián Prieto, quien quedó aturdido por los quiebres de cintura; recordó en parte a la descomunal maniobra de Lionel Messi contra Croacia en el Mundial 2022, en el pase a la final.
A 20 minutos del final y con Argentina 2 a 0 arriba, Lio recibió de Julián Álvarez, encaró al zaguero Josko Gvardiol, de los mejores de la copa, e hizo lo que quiso. Desairó al croata con una jugada de potrero inolvidable, y sirvió el pase atrás para que la Araña Álvarez ponga el tercero.
RUBEN BOTTA, EL REFUERZO DE LUJO DE TALLERES
Codiciado por varios clubes, entre ellos Boca, Ruben Botta se inclinó por Talleres y el equipo de Walter Ribonetto consiguió un refuerzo de categoría. El ex Colón de Santa Fe hasta aquí fue gravitante, con un par de goles con su sello y habilitaciones de lujo.
Convirtió en la goleada sobre Rosario Central, con una media vuelta que desconcertó al arquero Jorge Broun. También en el clásico frente a Instituto, un gol maravilloso después del control con el pecho, y poniendo la pelota en el ángulo. Y el pase gol maravilloso para el 2 a 1 contra Argentinos. Un lujo.