Un escándalo sacude por estas horas en altas instancias del Gobierno de Córdoba, por una investigación contra una funcionaria policial que habría espiado al ministro de Seguridad de la provincia, Alfonso Mosquera, y al fiscal General, Juan Manuel Delgado, cuando estos celebraban una reunión privada, en el palacio de Tribunales.
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La delicada situación involucra nada menos que la Jefa de Seguridad de la sede del Poder Judicial de Córdoba, quien habría sido sorprendida in fraganti, escondida mientras los altos funcionarios mantenían la reunión, según indicaron fuentes de tribunales a Cadena 3.
Por esta actitud tan irregular, la funcionaria ya fue sancionada y apartada del cargo, pero no se dieron mayores detalles sobre un episodio de mucha gravedad, ocurrido en horas de la tarde del miércoles en Tribunales I.
Según trascendió el motivo de la reunión entre el ministro y el fiscal general tuvo como tema excluyente el escándalo institucional detonado en Córdoba por las visitas de policías a los domicilios particulares de comerciantes y padres de alumnos, que participan de los reclamos contra las restricciones a la libertad de circular y de trabajar en Córdoba.
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Por su parte, la titular del Tribunal de Conducta de la Policía de Córdoba, Ana Becerra, comentó que “lo sucedido fue una situación menor que se va a sancionar directamente, porque es una de las facultades disciplinarias inherentes a la fuerza policial”, expresó a Cadena 3.
Seguidamente entregó otra versión de lo ocurrido: “sucedió en un momento que custodiaban el lugar, la Jefa de Seguridad se estaba atando los borceguíes cuando salía el ministro y no lo vio ni lo saludó correctamente. Es una falta menor y, si fuera de gravedad, se envía al Tribunal de Conducta, pero esto no ha sido así”. aseguró.
