Los alegatos en el juicio a 13 policías por el crimen de Valentino Blas Correas en la madrugada del 6 de agosto de 2020 en Córdoba, iniciaron este miércoles. En un cuarto intermedio, la madre del difunto, Soledad Laciar, aseguró: “Me partió el corazón ver la última imagen de mi hijo con el orificio de la bala”.
“Verlo acostado, de espaldas con la marca del ingreso de la bala fue algo muy fuerte”, analizó la mujer en diálogo con ElDoce. Sin embargo, aclaró que lo peor ya pasó porque Blas “ya no está conmigo”.
La fotografía la presentó el fiscal de la Cámara 8va. del Crimen, Fernando López Villagra, anunciando que los cabos primero mataron al adolescente de 17 años abusando de sus condiciones de policías. Por eso, pidió la inhabilitación absoluta para ejercer funciones públicas y portar armas.
El cruce entre Lucas Gómez y Laciar previo a los alegatos
Previo al inicio de los alegatos, Lucas Damián Gómez, pidió la palabra, analizó lo ocurrido esa noche. El imputado de homicidio calificado y agravado por su condición de funcionario policial, anticipó que no respondería preguntas y aseguró que estuvo “shockeado” y con la “mente en blanco” en los minutos posteriores al hecho.
“Con la terapia descubrí que estaba equivocado, que estaba equivocado en lo que yo había escuchado”, aseveró el cabo. Indignada con lo que acababa de escuchar, la mamá de Blas Correas le respondió y lamentó que en la cárcel no le hayan hecho pensar en la víctima.
“Vuelvo a insistir que esto está todo mal. Lamento que en tanto tiempo de terapia no le hayan hablado de las víctimas”, sentenció la mujer. En medio, el abogado de Gómez, Gastón Schönfeld, solicitó una objeción que el tribunal no aceptó y el letrado hizo gestos que ella evidenció: “Te voy a pedir respeto, por las caras que hacés”.
La acusación para Gómez y Javier Alarcón
Villagra anticipó en el inicio de su alegato que el MInisterio Público Fiscal sostendrá la acusación de homicidio doblemente agravado para los dos policías acusados de asesinar a Blas Correas, Gomez y Javier Catriel Alarcón, lo que implica que pedirán la prisión perpetua.