La Justicia de la provincia confirmó Cristian Bazán, reconocido locutor, va a juicio por una causa que investiga una supuesta estafa millonaria en perjuicio de vecinos y vecinas. Según el expediente, se lo acusa como el organizador de una asociación ilícita.
CRISTIAN BAZÁN, A JUICIO POR UNA SUPUESTA ESTAFA MILLONARIA
La Cámara de Acusación rechazó este martes 6 de agosto la apelación que el locutor realizó. De esta manera, el juicio por presuntas estafas reiteradas en la causa Viviendas Zenit quedó confirmado.
El expediente instruido por la fiscal subrogante Daniela Maluf entró en sorteo, que decidió que quede a cargo de la Cámara 11ª del Crimen de Córdoba. En ese tribunal, determinaron que por ser causa compleja debe tener tratamiento colegiado.
La causa tiene como principal acusado al titular de Viviendas Zenit, Martín Cuestaz. La abogada Marina Romano representa a 35 clientes que se consideran damnificados y la defraudación a los particulares que se consideran damnificados ascendía a 18 millones de pesos, a fines de 2022.
DE QUÉ Y POR QUÉ SE LO ACUSA A CRISTIAN BAZÁN
Según el expediente, Bazán fue el supuesto “organizador” de la asociación ilícita y el presunto autor de ocho estafas por la venta de casas prefabricadas. Es que, las viviendas nunca fueron entregadas a sus compradores.
Paralelamente, se piensa que Cuestaz, quien tiene antecedentes de estafas con automóviles, fue autor de 42 estafas por venta de viviendas que no fueron entregadas como fue pactado. Además, hay otros cinco acusados:
- Valentina Milagros Bonilla,
- Matías Emanuel Díaz,
- María José Gómez,
- Mario Guillermo Pereyra Isuani
- Paula Carolina Pérez,
Todos recibieron los supuestos delitos de “asociación ilícita, en calidad de organizadores” y “coautores de estafas reiteradas”.
QUÉ DIJO BAZÁN EN SU DEFENSA ANTES DE SER ENVIADO A JUICIO
En aquel momento, Bazán dijo en su defensa que él fue “un instrumento publicitario contratado”, a través de su programa televisivo Me la juego. En este sentido, el expediente indica que el locutor uso su imagen para convencer a personas de adquirir las casas diciéndoles que era “una empresa seria” y que eran de su conocimiento.